La Laguna posee el hato lechero más productivo del país y sus establos son un ejemplo de gran inversión en tecnología para lograr los mayores estándares de manejo lechero. Sin embargo, como productor lechero siempre te preguntas: ¿Estoy seleccionando los toros y vaquillas correctas? ¿Qué tanto semen sexado debo usar? ¿Debería trabajar fertilidad in vitro en mis vaquillas? ¿Estoy maximizando los recursos que invierto en mí operación?
Por muchos años, los productores lecheros han basado la selección en sus bases de datos productivas y la inseminación artificial con toros bien evaluados ha sido la principal estrategia de mejoramiento genético. Lamentablemente asumíamos que una vaquilla con buen tipo podría portar buena genética, pero de esta manera solo adivinábamos. Ahora, gracias a los avances en genómica lechera podemos acceder a un panorama más certero del potencial genético de nuestra población de hembras.
Beneficios de la Genómica Lechera
La genómica se basa en el análisis del ADN para predecir el potencial genético de animales jóvenes que no cuentan con registros productivos. Inició en el 2009 con el análisis de toros que entraban en programas de inseminación artificial. Ahora, su uso se ha extendido a la población de hembras lecheras y los avances logrados por los establos que han implementado la genómica son 3-4 veces más rápidos que sin el uso de la tecnología.
Conocer el verdadero potencial genético de nuestras vaquillas nos permite desarrollar estrategias y tomar decisiones basadas en información científica que ha sido probada en países alrededor del mundo como Estados Unidos y Brasil. La genómica es particularmente útil para rasgos como fertilidad y longevidad, características que toman muchos años antes de poder ser evaluadas. La confiabilidad de las predicciones genómicas es similar a tener 25-30 hijas lactando para un toro o 7 lactancias registradas en el caso de las hembras. Lo que se traduce en hasta 75% de confiabilidad, más del doble en comparación con los métodos basados en pedigrí que alcanzan el 35% de confiabilidad.
Basado en la genómica un productor puede tener una imagen completa de sus vaquillas desde las 4 semanas de edad del animal, incluyendo un amplio panel de características como productividad, fertilidad, longevidad y conformación (Tabla 1), además, rasgos específicos como proteínas de la leche y verificación de la paternidad. Conocer desde temprana edad qué becerras serán más productivas y cuales no tienen el potencial deseado (por lo que sería mejor vender siendo joven), le permite al ganadero estar informado para ahorrar los costos de crianza del ganado genéticamente inferior.
Los resultados genómicos incluyen índices como el Mérito Neto, Mérito en Queso y Mérito Fluido que facilitan la clasificación de vaquillas ya que con un solo valor ponemos énfasis en diversas características a la vez (Tabla 2). El índice con el que clasificaremos nuestras vaquillas debe estar alineado con nuestros objetivos de selección. Los productores pueden usar un índice comercial como el MN$ para la identificación de vaquillas superiores. Por ejemplo, las 3 primeras vaquillas de la tabla 1 son superiores al resto en MN$ y una estrategia adecuada deberá enfocarse en que estas vaquillas transfieran su genética a las próximas generaciones.
Además de mejorar las características productivas y de fertilidad, podemos reducir condiciones indeseadas como enfermedades genéticas (Brachyspina, haplotipos de fertilidad, etc), frecuencia de mastitis y realizar cruzamientos dirigidos para evitar estas condiciones. Debido al creciente interés en la salud y el bienestar animal; seleccionar un hato más saludable puede resultar de gran utilidad para reducir el uso de medicamentos y antibióticos y reducir costos.
Para obtener el mayor retorno de inversión en genómica, los productores deben usar los resultados durante toda la vida del animal con el fin de tomar decisiones confiables que realmente aceleren la ganancia genética. Entre las decisiones que podemos tomar usando los resultados genómicos son: 1) criar o vender un animal, 2) usar o no semen sexado en determinada vaquilla, 3) que tanto semen sexado usar, 4) usar una vaquilla como donadora o receptora para fertilidad in vitro, 5) usar semen de carne, etc.
Los establos de La Laguna pueden acceder a esta tecnología con solo enviar una muestra de sangre, cartílago de la oreja o pelo. Los resultados obtenidos contienen un perfil completo del potencial genético de cada uno de los animales (Tabla 1). En la región hemos evaluado animales de diversos establos y hemos corroborado el poder de la genómica para diferenciar animales superiores de los inferiores. Además, los resultados demuestran que los establos de la región aún tienen margen importante para el mejoramiento genético de las características clave en rentabilidad de la producción lechera.
Con enfoque en las necesidades de establos lecheros comerciales, Neogen ha desarrollado Igenity®, la línea más completa de pruebas genómicas. Con Igenity® puedes evaluar los rasgos clave que afectan la productividad lechera en establos comerciales. Este enfoque en las características clave se refleja en pruebas con mejor costo-beneficio, que incrementan la confiabilidad en las decisiones que diariamente tomas en tu establo lechero.
Entender la genética de nuestro ganado lechero, es solo una parte para el desarrollo de un buen establo, el buen manejo es esencial para lograr que esa genética pueda expresarse al cien por ciento. Finalmente, la genómica es para el ganadero que ha puesto especial atención en todos los aspectos clave de su operación.
