Un remate de AFA durante Expoagro fue la excusa para encontrarse con Silvio Baiocco y escuchar una disertación. El especialista brindó un panorama de lo que está pasando en la ganadería argentina. Precios, China, faena de embras, vacas, frigoríficos fueron algunos de los ejes de la charla.
En entrevista con este medio, Baiocco explica que lo que ocurre hoy, es que se está atravesando un muy buen momento para la exportación, pero está focalizada en China. Es un mercado con precios baratos que involucra a la vaca, para explicar el 70%. Eso fue lo que arrojó el mes de enero, con unas 50.000 toneladas de las cuales el 70% fueron al gigante asiático.
«Argentina no tiene materia prima para exportar, sino podría seguir exportando volúmenes más interesantes a otros tipos de mercados. Se completaron las 30.000 toneladas de la cuota Hilton, que este año empieza a caminar con precios distintos. Estamos arriba de los 12.500 dólares la tonelada cuando en diciembre terminamos en 9.500. Después está la cuota 481 para aquellos animales que pasan por dietas de alta energía en los corrales de confinamiento. No hay mucho más para vender en Argentina» explica.
FAENA DE HEMBRAS
«La faena de hembras es preocupante. Estamos arriba del 48% en los dos primeros meses del año. Terminó arriba del 47% el último bimestre del año pasado. Yo tendía recaudos para hablar de liquidación en cuanto a la faena. Ocurre además que no tenemos posibilidad de acceso a otros mercados porque Argentina tiene que producir novillo, y para eso se necesita tiempo. Y el tiempo es plata. Con las tasas de interés como las que tiene el productor argentino, es impensado que se cambie la infraestructura productiva asociada al consumo interno para hacer procesos de re cría e ir a novillos más pesados para saltar a los mercados mundiales».
Luego de desarrollar el concepto de la trazabilidad uruguaya, se le consulta a Baiocco qué es lo que le falta a Argentina para llegar a esos niveles. El especialista agrega: «En Argentina falta previsibilidad. Durante 10 años estuvimos fuera de los mercados del mundo, o muy restringido. Eso da señales como productor. Si eso pasa, vas a producir algo que terminen comprando, como es el mercado interno. Argentina abasteció al mercado interno durante 10 años, tiene que cambiar la matriz productiva, pero es muy difícil cuando no tenés previsibilidad ni equilibrio del punto de vista de la economía. La inflación de un 47% del año pasado y los niveles que estamos teniendo en este 2019, hace impensable que alguien deje en el campo a un animal para echarle más kilos, cuando todos los meses tenés una tasa relativa de 5%».