Ante la aparición de casos recientes de carbunclo bacteriano en el partido de Carlos Casares, provincia de Buenos Aires, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) volvió a hacer hincapié en las recomendaciones para prevenir y alertar sobre esta problemática.
El carbunclo bacteriano, carbunclo o ántrax es una enfermedad infecciosa altamente contagiosa, que afecta preferentemente a los rumiantes y es transmisible a otros animales y a las personas. Esta enfermedad que se encuentra diseminada en casi todo el mundo y es responsable de importantes pérdidas económicas, se caracteriza en los bovinos por presentar muerte súbita con sangre en los orificios naturales (boca, nariz y ano), en los cuales se encuentra la bacteria que la produce.
Se transmite de animales enfermos o muertos a los humanos pero no se contagia entre personas enfermas o convalecientes. En estos casos, la severidad de la enfermedad varía según el modo de contagio y la celeridad en la atención del enfermo.
Cuando la bacteria entra en contacto con el oxígeno forma una espora que es resistente en condiciones climáticas severas. Luego, las esporas ingresan al organismo de los animales o de las personas donde liberan toxinas que pueden llegar a causar la muerte.
En las personas, según la vía de ingreso de la bacteria al organismo, el carbunclo se manifiesta de distintas formas (dérmica, intestinal o digestiva, respiratoria o pulmonar,
Uno de los puntos clave está en que el carbunclo se encuentra dentro del grupo de enfermedades de denuncia obligatoria por lo que ante la sospecha o confirmación de algún caso, los productores deben ponerse en contacto con el Senasa para notificar sobre esta enfermedad.