Tras haber logrado en 2018 la mayor producción de carne en una década y haber sido una de las tres industrias con mayor crecimiento, los frigoríficos bovinos iniciaron el 2019 en baja.
En enero, se faenaron 1,05 millones de cabezas, un siete por ciento menos que las 1,12 millones de cabezas del mismo mes del año pasado, según la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra).
“La menor oferta se habría explicado por los problemas climáticos que dificultaron la llegada de los animales a la industria”, fundamentó Ciccra.
De todos modos, esta no es la principal señal de alerta para la cadena sino que se mantuvo la tendencia creciente en la faena de hembras.
Más vientres
Según Ciccra, en enero la participación de las hembras en la faena total llegó a 47,8 por ciento, 3,2 puntos más que el 44,6 por ciento de un año atrás y la mayor tasa desde, al menos, 2003.
“En términos comparativos, la participación de las hembras en el arranque de 2019 sólo se puede comparar con las registradas en los eneros de 2008 y de 2009, período en el cual el sector transitó la peor fase de liquidación de hembras de las últimas décadas”, subrayó Ciccra.
Y agregó que, al considerar los últimos cinco meses, es decir el período septiembre-enero la importancia de las hembras en la faena total pasó de 43,8 por ciento a 46,9 por ciento.
Esta semana, el secretario de Agroindustria, Luis Etchevehere, intentó calmar la preocupación por esta situación al resaltar el stock de vacas actual es el mayor desde 2007.
“La creciente demanda de China y Rusia y sobre todo el elevado costo del dinero (aún a pesar de la reducción observada en las últimas semanas), son factores que obligan a que los productores ganaderos decidan vender cantidades crecientes de vacas y vaquillonas a la industria frigorífica”, explicó Ciccra.
Categorías y provincias
Al desagregar por categorías, surge que la faena de vacas experimentó un crecimiento de 14 por ciento entre enero de 2018 y enero de 2019, llegando a representar 18,8 por ciento de la faena total (+3,5 puntos porcentuales interanuales).
Asimismo, la faena de vaquillonas creció 1,6 por ciento anual, llegando a representar 13,8 por ciento del total (+1,2 puntos porcentuales interanuales). En cambio, la faena de terneras disminuyó y perdió 1,4 puntos porcentuales de importancia relativa, hasta representar 15,2 por ciento del total.
Cabe destacar además que esta tendencia es común a todas las provincias: la importancia relativa de las hembras en la faena pasó de 43,6 a 46,8 por ciento en Buenos Aires, de 35,1 a 37,6 por ciento en Santa Fe; de 47,5 a 47,8 por ciento en Córdoba; y de 33,9 a 35 por ciento en Entre Ríos.