La industria de alimentos está convencida en entregar al consumidor productos cada vez más saludables, y la industria cárnica es el primero en esta orientación. El consumo de productos cárnicos en América Latina está influenciado por muchos factores diferentes tales como socios culturales, religiosos y mala información acerca del tema de elaboración de estos productos.
Debido a esta mala información, y el hecho que los consumidores cada día son más conscientes del consumo de productos sanos y seguros, la industria está trabajando en el desarrollo de productos de etiqueta limpia, que son una mezcla de materias primas y aditivos naturales.
A continuación discuto las mejoras en el desarrollo de productos cárnicos:
- Productos bajos en sodio: consiste en reemplazar parte del cloruro de sodio, por cloruro de potasio. No se reemplaza en su totalidad porque el cloruro de sodio da fruto a una buena extracción de proteína durante el proceso de elaboración de emulsiones cárnicas y, por su parte, la sal es el saborizante natural mas importante, que ayuda a regular el funcionamiento de la tiroides.
- Productos bajos en grasa: se reduce la grasa animal o se sustituye por grasa vegetal, en gran proporción, dado que la grasa ayuda a la palatabilidad o sabor de los productos embutidos.
- Productos libres de alérgenos: la industria está trabajando en el sustituto 100% de productos que contienen alérgenos, con el fin de crear un consumo más saludable.
- Sustitución de nitritos por extractos naturales: estamos trabajando con el extracto de apio, que contiene nitritos naturales que ayudan a evitar el crecimiento de bacterias patógenas en los productos.
- Sustitución de conservantes artificiales por conservantes naturales: uno de los conservantes naturales es el vinagre, el cual se encuentra de manera natural en diferentes frutas, el uso de este, es una forma de ayudar a la sustitución de conservantes artificiales.
Así, podemos darle un giro total al concepto de productos embutidos cárnicos de América Latina y capturar valor de una nueva manera.
El proceso de innovación abarca la cadena de valor por completo, desde el concepto del desarrollo hasta su llegada a las manos del cliente. En este sentido, la innovación define o incorpora la creación de valor a través de nuevos productos, servicios y tecnologías (ya sea por medio de nuevos desarrollos, aplicaciones, empaques y propuestas).
Cada día, es necesario buscar y encontrar inspiración en el mercado o competencia, agregar valor a lo que tenemos, siempre a través de nuevas formas.
Lea aquí en su totalidad el más reciente blog de la Ing. Sandra Soto Cuento, especialista colombiana en ingeniería de alimentos.