Los directivos de la corredora de granos y agencia de bolsa BLD no pudieron disfrutar del sol primaveral del fin de semana en esta ciudad. Después de que el viernes se conociera que la firma, un peso pesado del sector, cayera en default por unos 100 millones de dólares, los directivos de la firma -que tiene unos 350 empleados de manera directa y unos 200 tercerizados- idearon un plan para sortear la quiebra al proponerles a los acreedores convertirse en accionistas de la compañía. El canje de la deuda, que se realizará a través de un acuerdo preventivo extrajudicial, será por unos 6000 millones de pesos que esperan concretarlo en un plazo no mayor a los 30 días.
Fabio Bini, presidente de BLD, reconoció -en diálogo con LA NACION– que los problemas de la empresa eclosionaron el jueves pasado cuando se cayó la venta de la Unidad Productora de Lechones (UPL), ubicada en el sudeste de Córdoba, que se ofertó a la firma Lartirigoyen por unos US$45.000.000. «Teníamos previsto que con esos fondos íbamos a hacer frente a los problemas de liquidez que tiene la empresa, pero esa operación se canceló», admitió el Bini.
El viernes pasado la empresa dejó de operar en la Bolsa de Comercio, fruto del derrumbe financiero de la firma, con un pasivo -según advirtió Bini- de 100 millones de dólares. Ese día también se suspendió el pago de los cheques ya librados a los productores, a los que ahora se les hizo una propuesta de quedarse con acciones de la empresa a cambio de las deudas.
«La propuesta implica convertir la deuda comercial de BLD en capital de la sociedad, a través de suscripción de acciones preferidas, de modo de fortalecer la empresa y proteger los intereses de los clientes», señaló el directorio de la compañía en un comunicado difundido este lunes.
La incertidumbre en el sector continúa a pesar del plan propuesto por la empresa para evitar la quiebra. Operadores de bolsa consultados por LA NACION creen que el pasivo es mayor a los 100 millones de dólares, y que parte de ese pasivo está contraído con empresas exportadores multinacionales que le compraron y ya pagaron a BLD unas 200.000 toneladas de soja y el dinero se esfumó.
Por eso, fuentes del mercado consideran que la jugada de BLD apunta a ganar tiempo pero que el problema está lejos de solucionarse y que recién comienza.
«La asamblea de accionistas de la sociedad decidió aumentar el capital de BLD SA en 6000 millones de pesos en acciones preferidas. Esta iniciativa contempla que los nuevos accionistas obtengan el 85 por ciento del capital, mientras que los accionistas anteriores conservarán el 15 por ciento», agrega el documento. Ahora quedará por develarse si los acreedores aceptan este canje de deuda y deciden no pedir la quiebra de la empresa.
Bini explicó a este diario que el derrumbe de BLD respondió «a una conjunción de factores negativos».
«En 2017 decidimos apostar a una inversión en una planta de cerdos en Córdoba a la que se podían asociar a los productores. Tras la devaluación del año pasado y el incremento de las tasas de interés empezamos a tener problemas para financiar esa inversión. A este problema se sumó luego el impacto de la devaluación del 12 de agosto y el reperfilamiento de los bonos y letras», indicó.
La sociedad de bolsa, que es el otro soporte de BLD, empezó a girar los títulos a otras sociedades, según aseguró el presidente de la compañía. «La sociedad de bolsa no tuvo inconvenientes y los títulos están a resguardo, aunque está cancelada la actividad», sostuvo Bini. Como la firma canceló las operaciones se transfirieron los títulos a otras sociedades para que los inversores puedan seguir operando, argumentó.
Datos de una firma clave
- 100 millones de dólares: Es la deuda de BLD que la empresa no pudo pagar y cayó en default. La propuesta que ofreció es convertir esa deuda en capital de la sociedad y que esas acciones pasen a manos de los acreedores
- 85% de las accciones: Es la proporción de las acciones de la empresa que pasarían a manos de los acreedores, si aceptan la oferta. El 15% quedaría para los actuales accionistas
- 350 empleados: Es el personal que trabaja en BLD en forma directa, a los que hay que sumar otras 200 personas que trabajan en servicios tercerizados. La intención es que no haya cambios para ellos si la empresa sortea la quiebra.
Fuente: lanacion