“Estoy convencido de que el futuro de la Argentina está en la cadena de alimentos y bebidas porque el agregado de valor es la diferenciación que nos va a permitir ampliar nuestro volumen productivo, de empleo, de ingresos y de inversión”, señaló el titular de la cartera nacional.
Y agregó: “Justamente hoy China vuelve a comprarnos aceite de soja, demostrando que la industria argentina tiene capacidad y potencial”, al tiempo que resaltó el compromiso que el Estado tiene para desarrollar herramientas para agilizar trámites y también en negociaciones internacionales.
La competitividad, recuperar el papel de productor y exportador de la Argentina son los ejes trazados para seguir avanzando en una agenda en común entre el Ministerio y COPAL.
Durante la reunión, Funes de Rioja resaltó que los anuncios de inversión durante el primer semestre de 2017 alcanzaron casi el 70% del total de los anuncios de todo el 2016. “Está claro que en el sector hay vocación”, sostuvo el presidente de COPAL, y agregó: “Necesitamos continuar trabajando con el sector público en una agenda de competitividad que esperamos poder firmar en noviembre”.
En el encuentro, se abordaron temas relacionados con el convenio de colaboración entre COPAL y los Ministerios de Agroindustria y Salud, la agenda legislativa, impuestos, transparencia en la cadena, financiación, negocios internacionales, sistema de control de alimentos, competitividad sectorial, convenios de corresponsabilidad gremial empresaria, promoción en diferentes actividades como vino, leche, golosinas, carnes, legumbres, enlatados, entre otros rubros de la industria.
La industria de alimentos y bebidas realiza exportaciones anuales por más de 25 mil millones de dólares, y representa al 44% de los envíos totales del país; lo que nos ubica en el 11° puesto a nivel mundial.
En la actualidad hay más de 14.500 empresas, de las cuales el 97% son pymes y el 61% son micro pymes, generando en su totalidad 370 mil puestos de empleo directo.