Aunque la faena de julio fue menor a la del mismo mes del año pasado, los datos acumulados en el primer semestre son positivos para los frigoríficos argentinos.
Desde el 1° de enero se faenaron casi ocho millones de cabezas bovinas que significaron una producción de 1,8 millones de toneladas res con hueso; un 3,1 por ciento más que en igual período de 2019, de acuerdo con el informe mensual de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra).
Si bien el consumo interno se retrajo, las exportaciones se incrementaron 15,5 por ciento hasta 475.700 toneladas, lo que significa un 26,5 por ciento del total, el porcentaje más alto en 25 años.
Pese a estos guarismos, la situación que atraviesan las empresas del sector no es buena, según se desprende del reporte de Ciccra.
“Lo que queda del segundo semestre se presenta con grandes signos de interrogación, tanto en el mercado interno como en el externo. Si bien las exportaciones del primer semestre fueron mayores que las del año pasado, sus valores de venta fueron inferiores, colocando a la industria exportadora en un nivel de producción adecuado, pero con márgenes muy escasos, casi en el límite de la producción rentable”, mencionó la entidad.
Y agregó que el panorama no es mejor para los industriales dedicados al consumo interno que “tienen grandes dificultades para mantener los volúmenes comercializados, lo que genera que los márgenes también se encuentren al límite de una operatoria rentable”.
En este contexto, el problema más grave que asoma es un posible corte en la cadena de pagos, ocasionada por la caída del consumo debido a las medidas de cuarentena por la pandemia de Covid-19.
“La caída del consumo interno, que ya genera problemas de cobro, comienza a generar alarma en la cadena comercial, frente a la posibilidad de que la misma se corte trasladándose al productor. Por otra parte la caída de los precios en el mercado internacional, fundamentalmente en el mercado chino, generan una enorme incertidumbre por la capacidad de la industria exportadora de continuar pagando los actuales precios”, destacó Ciccra.