La faena bovina en Argentina alcanzó, en agosto, a 1.100.000 cabezas, lo que significa un crecimiento del 5,9 por ciento en relación a las 1.038.000 cabezas del mismo mes del año pasado.
Esta cifra es la más alta para un mes de agosto desde 2009, cuando fueron 1.391.000 toneladas, de acuerdo a un reporte elaborado por el Consorcio de Exportadores de Carnes Bovinas ABC.
Del mismo modo, el informe señala que, en ocho meses, los frigoríficos argentinos faenaron 8.234.000 animales, 6,5 por ciento más que los 7.732.000 del mismo período de 2016.
El acumulado actual es el más alto desde 2013, cuando habían sido 8.303.000 ejemplares.
Más hembras
El reporte del Consorcio ABC, en tanto, advierte sobre el continuo crecimiento del porcentaje de hembras que se envían a los matarifes.
En agosto, la proporción en el total sacrificado fue del 42,8 por ciento, lo que confirma una tendencia alcista, especialmente de vacas, dentro de la faena nacional.
“Esta composición de la faena constituye un indicador poco promisorio para el sector, tanto por revelar un perfil de la oferta de carnes con menor presencia de novillos que reportan carne de mayor valor, así como también porque limitaría la recomposición del rodeo vacuno”, alertó el titular del Consorcio ABC, Mario Ravettino.