Las exportaciones argentinas de leche en polvo entera a granel declaradas en septiembre pasado fueron de 7.337 toneladas a un valor promedio ponderado de 3098 u$s/tonelada versus 5.312 toneladas a 3.233 u$s/tonelada en agosto de este año. En setiembre de 2016 se habían registrado 9.778 toneladas a un promedio 2.585 u$s/tonelada, según datos aduaneros.
El mayor precio declarado en septiembre pasado fue de 3497 u$s/tonelada y correspondió a 50 toneladas de Williner destinadas a Brasil, mientras que Nestlé envió a Chile dos partidas de 150 y 200 toneladas a 3.432 y 3.400 u$s/tonelada respectivamente.
A partir de mayo de 2018 el cupo de exportación de leche en polvo asignado a la Argentina por Brasil (que es del orden de 5.000 toneladas mensuales) dejará de existir luego de los desequilibrios regionales que el mismo generó en los últimos años en el Mercosur.
En ese marco, el ministro de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento de Brasil, Blairo Maggi, declaró en dos oportunidades que tenía planes para restringir el ingreso de leche en polvo proveniente de Uruguay y Argentina.
Si bien no cumplió ninguna de las dos amenazas, el sector privado brasileño entendió el mensaje de Maggi y cortó las compras de leche en polvo provenientes de la Argentina: el mes pasado apenas se registraron colocaciones de 150 toneladas de leche en polvo entera en ese destino. Chile (con ventas declaradas de 512 toneladas en septiembre) no pudo compensar lo que dejó de enviarse a Brasil y el grueso de los registros (5.050 toneladas) se remitió a Argelia (una plaza ultra competitiva por las colocaciones agresivas realizadas por europeos).
De hecho, los menores valores declaradas el mes pasado corresponden a 2.600 toneladas de Saputo enviadas a Argelia por un valor FOB de 3.000 u$s/tonelada. En el segundo trimestre de este año el valor FOB promedio de la leche en polvo había logrado superar los 3400 u$s/tonelada debido a que buena parte de las colocaciones se direccionaban a Brasil con precios mayores a 3.500 u$s/tonelada.
