El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) pondrá en marcha el Censo Nacional Agropecuario 2018 (CNA-18), que relevará todas las explotaciones agropecuarias y forestales del país. El operativo se realizará en el segundo semestre del año próximo, se extenderá por 75 días y a fines de 2018 se conocerán los resultados preliminares.
“Recuperar el censo agropecuario permitirá contar con una base estadística integral del sector. A su vez, brindará un marco para elaborar encuestas sobre temáticas particulares, que hoy no tenemos. Con ello, habrá datos estructurales y coyunturales, que estarán disponibles para actores públicos y privados”, dijo a Valor Carne el Ing. Agr. Eduardo Pirozzi, Director de Estadísticas del Sector Primario del INDEC, al frente del CNA-18.
¿Cuándo se realizó el último censo? “En nuestro país, por Ley, los censos deben hacerse cada cinco años. Hubo uno en 1988, otro en 2002 y un tercero en 2008. Pero este último, lamentablemente fue incompleto”, contó el Ing. Agr. Carlos Rossi, Coordinador de Encuestas y Censos del Sector Agropecuario, también a cargo del operativo. ¿Incompleto? “Así se califica un censo cuando no alcanza una cobertura territorial y de relevamiento de explotaciones acorde a los estándares mínimos internacionales, según los cuales la diferencia entre lo esperado y lo recolectado no debe superar el 3 a 4%. Pero en 2008, esa brecha fue mayor al 15%. Entonces, el último censo completo fue el de 2002”, explicó.
Por eso, el de 2018, será muy amplio. “Hay un vacío de datos de muchos años, por lo que en esta oportunidad se incluirán variables que de haber existido continuidad no sería necesario investigar con tanto detalle. La idea es dar respuesta a las demandas de los usuarios, con rigor estadístico”, aseguró Pirozzi.
Operativo 2018
El censo relevará todas las explotaciones agropecuarias del país para disponer de datos estructurales básicos como cantidad y superficie de las mismas, uso del suelo, existencias ganaderas, prácticas de manejo, equipamiento e infraestructura, mano de obra permanente y transitoria, y población residente en el campo, entre otros.
El territorio se dividirá en “segmentos censales” de alrededor de 140 explotaciones cada uno, o sea la cantidad que puede cubrir un censista durante el período de recolección de datos. Se trabajará con una estructura de 2.500 personas, que actuarán como boca de entrada de los datos, y otros 1.000 que se desempeñarán como supervisores y coordinadores para el monitoreo del operativo.
“Un aspecto clave es que los censistas tendrán formación agronómica, podrán ser profesionales, estudiantes universitarios, egresados de escuelas agrotécnicas o idóneos. Además, deberán residir en el área de trabajo. Buscamos que conozcan la temática y la zona para facilitar la efectividad de la tarea”, señaló Rossi.
¿Cómo se hará la colecta de datos? Se realizarán entrevistas personales a los productores o informantes calificados en el caso de personas jurídicas.
Un cambio muy importante respecto de los censos anteriores es la forma de captura o recolección de datos. “El cuestionario en papel será reemplazado por un medio electrónico, o sea que el censista trabajará con una tableta. Para ello, estamos desarrollando un aplicativo específico que incluye información de los catastros, mapas y otros datos geográficos”, adelantó Pirozzi. Así, los cinco formularios que había antes, uno por región productiva, en 2018 se condensarán en uno sólo para todo el país, con aperturas particulares para las actividades específicas de cada zona.
Otro avance significativo es que si bien el aplicativo trabajará off line, en algún momento, cuando el censista vuelva a su casa, hotel o a un lugar donde tenga conexión, se sincronizará la tableta con el servidor central y se transmitirán los datos recolectados durante la jornada. A su vez, por esa vía, podrá recibir información de los supervisores que controlarán la marcha del operativo.
“Todo esto minimizará errores. Por un lado, con los condicionamientos que le ponemos al aplicativo, el censista no podrá seguir adelante con la encuesta si un dato se cargó en forma equivocada, el sistema se lo hará corregir en el momento. Y después de la transmisión se podrá auditar lo relevado rápidamente, habrá un seguimiento de cobertura y calidad”, subrayó Pirozzi.
¿Resultados? Con todos estos avances, los datos preliminares estarán disponibles a fines de 2018 y los definitivos en 2019. “Si bien se publicarán por departamento, igual que antes, tendremos una mayor precisión porque el establecimiento se mapeará por parcelas”, indicó Rossi. Como el aplicativo tendrá el componente geográfico, se podrá preguntar la actividad y el uso del suelo con ese recorte. “Si la explotación atraviesa más de un departamento, por ejemplo, cuando un productor tiene 200 ha en uno y 1.000 ha en otro, en censos anteriores, se asignaba todo al departamento donde estaba el casco o cabecera. En 2018, será distinto, el dato se ubicará en el departamento donde realmente está la parcela. Entonces, la información se obtendrá mucho más acotada en el espacio, definida en áreas más chicas”, detalló.
En la ganadería
Tal como en todas las actividades agropecuarias se recolectarán datos estructurales básicos, incluyéndose además de las existencias de bovinos, detalles del manejo, alimentación y sanidad, producción de forrajeras anuales y perennes, cultivos agrícolas con destino ganadero, producción de heno, silaje y henolaje, uso de insumos, entre otros.
¿Podremos saber por ejemplo donde está la recría? “Un gran cambio es que se relevará la composición de los rodeos. En censos anteriores se indagaba el total de cabezas y ahora se lo hará por orientación productiva”, reveló Pirozzi. En concreto, prosiguió, “en 2018, se preguntará la cantidad de bovinos por categoría dentro de la cría, recría e invernada. Y asociado con ellos van las prácticas empleadas. O sea que se sabrá qué porcentaje de recriadores utiliza tal o cual técnica o cómo evolucionó la misma respecto de otros censos. Es una novedad”, puntualizó. ¿Plan sanitario? “La pregunta será si la explotación tiene un plan, alguien podrá responder que ‘no’ pero que sí hace una serie de prácticas: vacuna, desparasita, de acuerdo a las necesidades. Todo esto será registrado”, agregó.
Otro aspecto de interés es la comercialización de hacienda. “Se consultará qué canales se utilizaron para las ventas de animales en pie durante el año de referencia del censo: 1º de julio de 2017 al 30 de junio de 2018”, anticipó Rossi. En ese sentido, se considerarán los mercados concentradores (Liniers, Rosario, Córdoba), remates feria, ventas directas o por consignación a frigoríficos o mataderos, a carnicerías, entre otros. También, se indagará si se efectuaron traslados hacia otras explotaciones propias.
Para finalizar, de cara a 2018, Pirozzi planteó: “el éxito del operativo requiere el apoyo de los productores, es fundamental que estén abiertos al censo, que tengan la certeza de que estamos trabajando con seriedad. Las respuestas individuales son confidenciales y los datos se usarán exclusivamente con fines estadísticos. La idea es que todos puedan utilizarlos para hacer sus propios análisis y tomar decisiones sobre bases ciertas”.
Por VALOR CARNE
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