Los excrementos fueron recogidos el pasado lunes en Suncheon, a unos 415 kilómetros al sur de Seúl, el segundo hallazgo de una cepa altamente contagiosa en esta temporada, según la agencia Yonhap.
La confirmación se produce dos días después de que el Gobierno surcoreano detectara la presencia del virus en una granja avícola con unas 12.300 aves -que fueron sacrificadas como medida preventiva- situada a unos 296 kilómetros al sudoeste de Seúl, y cuyo análisis dio positivo en la cepa altamente patógena H5N6.
El Gobierno surcoreano ha prohibido los movimientos a nivel nacional de aves de corral, vehículos agrícolas y de los empleados procedentes de las instalaciones cercanas a la granja hasta el próximo lunes, una prohibición que se aplicará durante 48 horas a partir de hoy al resto del país, detalló Yonhap.
Durante este período, las autoridades de cuarentena desinfectarán todas las granjas avícolas y vehículos de transporte del país, así como las tiendas que venden pollos y patos, mientras que el comercio de pollos será prohibido indefinidamente.
Corea del Sur, que decidió elevar al máximo su nivel de alerta por gripe aviar, ha detectado varios brotes desde el año pasado, uno de los cuales obligó al país a sacrificar más de 33 millones de aves el pasado noviembre, en el que se convirtió en el más mortal registrado en el país asiático.
El sacrificio masivo de aves realizado durante meses por los continuos casos de gripe aviar en Corea del Sur dejaron al país sin huevos y disparó su precio (así como el de la carne de pollo), por lo que se han tenido que importar unos 25 millones desde países como Estados Unidos o España.