Las lluvias volvieron a pasar de largo el fin de semana pasado sobre amplias regiones de la pampa húmeda que estaban con bajas reservas de humedad y la situación de sequía comienza a ser cada vez más notoria en más zonas de la Argentina. Foto: LA NACION Sólo en la región agrícola núcleo, que comprende…
Las lluvias volvieron a pasar de largo el fin de semana pasado sobre amplias regiones de la pampa húmeda que estaban con bajas reservas de humedad y la situación de sequía comienza a ser cada vez más notoria en más zonas de la Argentina.
En la actualidad, casi todo el norte de la provincia de Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba y gran parte del NOA y el NEA se encuentran en condiciones de escasas reservas hídricas a sequía. El año pasado, a esta altura había problemas más focalizados de sequía en el sudeste bonaerense y parte del centro de Córdoba y centro sur de Santa Fe.
«Estamos hablando de la falta agua en los estratos superficiales del suelo, que en este momento determinan el avance de las siembras y el estado de los maíces tempranos que están a punto de comenzar su etapa más crítica, la floración», explicó Russo. «Este año, muchos lotes se sembraron más tarde y no alcanzaron un crecimiento suficiente que les permita explorar las reservas que hay en profundidad», agregó el experto de la Bolsa de Comercio de Rosario. La semana pasada había unas 100.000 hectáreas del cultivo que se encontraban en condiciones regulares a malas.
Según ese informe oficial, esta semana sería «muy variada» la intensidad de lluvias que se registraría en el país. Para la Bolsa de Comercio rosarina, en los próximos quince días las lluvias estarán por debajo de lo normal. En tanto, desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, Esteban Copati, jefe de estimaciones agrícolas de la entidad, señaló que por el momento allí no ven «tan desalentador» el panorama para la siembra porque hubo regiones donde, en algunos casos a veces por debajo de lo esperado, se fue recomponiendo humedad, como en sectores de Córdoba. «No es algo generalizado, pero si se llega a cortar la lluvia hasta fin de diciembre se va a complicar», precisó Copati.
Desde el INTA, Pablo Mercuri, director del Centro de Investigación en Recursos Naturales, señaló que salvo el sudeste bonaerense y algunas áreas del sur de Buenos Aires, «prácticamente toda la región pampeana presenta una situación deficitaria en cuanto a la falta de agua y sequía edáfica en el horizonte superficial». Destacó que «más del 50% del área núcleo de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires, y el sur de la Mesopotamia, presenta a la fecha una situación de reservas de agua útil para cultivos de gruesa escasas o sequía edáfica». En el otro 50% hay reservas regulares «ya no adecuadas para el crecimiento de cultivos de siembra temprana o implantación de gruesa».