Un tractor y una sembradora quedaron ayer envueltos en llamas en un campo de la zona de Gonzales Chaves, en el sudeste bonaerense.
Según contaron productores y técnicos de la región, la maquinaria es de una familia de productores de Tres Arroyos que estaba trabajando en ese lugar. El incendio se habría originado en un problema eléctrico en el tractor. Y se propagó rápidamente sobre el rastrojo de trigo. Los operarios estaban sembrando soja.
De acuerdo a fuentes consultadas, el valor de la maquinaria, entre el tractor y la sembradora, rondaría 1,7 millones de pesos, aproximadamente. Salvo daños materiales, no hubo víctimas.
La familia productora había usado ese tractor para sembrar toda la campaña de granos finos (trigo y cebada) y una parte de la de granos gruesos, como ahora la soja.
«Se habría originado en un cortocircuito y cuando el operario se dio cuenta el tractor ya estaba en llamas», contó un técnico.
El año pasado, en el sudeste bonaerense hubo numerosos incendios, en esa oportunidad con cosechadoras. En el caso de las cosechadoras, los incendios más comunes se dan por la falta de mantenimiento de limpieza en la zona del motor o zonas de poleas que poseen mayor fricción. Además, el otro factor que es determinante es el clima, ya que en días con altas temperaturas y secos hay más riesgos.
En un informe, hoy el Ministerio de Agroindustria bonaerense recordó varias pautas para evitar incendios con la maquinaria. Entre otros puntos, aconseja no cosechar en las horas centrales del día, situar tractores y maquinaria lejos de los montes, ante la posibilidad de incendios y evitar realizar la cosecha bajo condiciones ambientales de alto riesgo de incendios, esto es con una temperatura mayor a 35 °C, humedad relativa menor a 35% y velocidad del viento mayor a 35 km/h.
También aconsejó limpiar con sopladora, al menos tres veces al día, sitios de acumulación de granza como pueden ser el motor, sistema de admisión de aire, zonas de rodamientos y piezas con fricción. Y recomendó cubrir la salida de los tubos de escape de los tractores y cosechadoras con mallas metálicas que impidan la salida de chispas de gran tamaño o carbones encendidos.