La «Guerra Comercial» entre China y EE.UU. llegó a su punto máximo luego de que las autoridades del Ministerio de Comercio del gigante asiático comunicarán que aplicarán un arancel adicional del 25% a las importaciones de poroto de soja estadounidense
Lo que por el momento es una amenaza económica y política del presidente chino Ji Xiping surge porque el gobierno de Donald Trump informó que impondrá nuevos aranceles de importación a una extensa lista de 106 productos provenientes de China.
Este «factor político» impactó inmediatamente en el mercado de granos. Si bien en Chicago los precios de la soja registraron una baja del 2,2% al cerrar a u$s 373 por tonelada, en el MATBA se negoció este martes a u$s 308 con una suba del 0,7%.
LPO conversó con diversos consultores que analizaron cómo impacta en la Argentina el bloqueo de China a la soja de EE.UU. dadas las posibilidades concretas de que la «Guerra Comercial» entre ambas potencias beneficie a Sudamérica en el mediano plazo.
«Da la impresión que todo esto tiene 60 días de plazo que es el tiempo de revisión de los aranceles que fijó EE.UU. Tanto Trump como Ji Xipiping están jugando con el tiempo para ver cómo arreglan», dijo Javier Buján, presidente de la consultora Kimei Cereales.
«En principio, esto cambia totalmente el panorama de oferta y demanda mundial en el mercado. EE.UU. exportó a China 36 millones de toneladas y el único lugar donde podrá suplir esto es en Sudamérica, principalmente en Brasil y Argentina», agregó.
En este sentido, Buján comentó que «lamentablemente a nosotros nos encuentra en medio de una cosecha baja por la sequía en torno a las 39 millones de toneladas. Pero sin duda alguna esto es alcista para Sudamérica y para la Argentina puntualmente».
En EE.UU. la escalada en el conflicto con su principal comprador de soja generó preocupación. La American Soybean Association expresó su «frustración» y solicitó a Trump que «reconsidere la estrategia de suba de aranceles que provocó las represalias».
«No es fácil determinar cómo va a impactar la ‘Guerra Comercial’ en Argentina porque habría que ver si no se trata de una bomba de humo y en algunos meses más llegan a un acuerdo bilateral», advirtió Gustavo López, director de la consultora Agritrend.
«En principio, todos los precios en Sudamérica deberían tener una prima positiva por encima de lo que son los precios en el Mercado de Chicago; pero esto es como un juego de ajedrez en el que influyen muchas y diversas variables», sostuvo el especialista.
«El punto es qué puede llegar a pasar con la cosecha norteamericana que va a China porque allí tendríamos un efecto directo de competitividad. Los chinos están intentando tomar cada vez más injerencia en Sudamérica como materia prima», añadió López.
La consultora Oil World estimó que la producción de soja en Sudamérica sería de 168 millones de toneladas: 116 millones se producirían en Brasil; 38,5 millones en Argentina; y 14,3 millones se reparten mayormente entre Paraguay y Uruguay.
Cabe mencionar que China es el principal importador mundial del poroto de soja, con una participación mayor al 60% de las compras mundiales que, para la campaña 2017/18, representará una absorción de casi 100 millones de toneladas.
De esta manera, China importa casi el 50% de poroto de soja de Brasil, alrededor de un 40% de EE.UU., y un 10% restante desde otros países, mayormente Argentina, seguida de Paraguay, según datos difundidos por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
La entidad señaló que si continúa la «Guerra Comercial», «podrían reacomodarse los flujos de comercio de modo que se incrementen los embarques sudamericanos a China y EE.UU. destine una mayor proporción de su poroto a otros destinos alternativos».
«Es fundamental tener en cuenta que más allá de un incremento puntual en el precio de un producto, una ‘Guerra Comercial’ entre las dos principales economías del mundo difícilmente dejará un saldo positivo en la economía global», concluyó la BCR.