En la semana por el Día de la mujer, organizada por la Municipalidad de Ataliva Roca, se invitó a la Agencia de Extensión Rural de Santa Rosa, a participar con una charla técnica sobre sustentabilidad. Nos pareció oportuno ofrecer una biotecnología disponible al alcance de todos como es el compostaje, y las acciones relacionadas al mismo que nos permiten lograr mayor sustentabilidad ambiental a nivel local.
Se abordaron los conceptos de sustentabilidad y responsabilidad intergeneracional, y la discriminación entre recurso (ayuda o medio del que una persona se sirve para conseguir un fin o satisfacer una necesidad), basura (se refiere a cualquier residuo inservible, a todo material no deseado y del que se tiene intención de desechar) y residuos (aquellas materias generadas en las actividades de producción y consumo que no han alcanzado un valor económico en el contexto en el que son producidas).
Notamos que parte de la basura que se genera en los hogares puede reducirse (al ser más conscientes de nuestros consumos y elegir aquello que genere menos desperdicios), reutilizarse (en caso de envases descartables para aprovecharlos como maceteros o semilleros) y reciclarse, en particular el material orgánico que puede compostarse.
Asimismo, si la familia tiene una dieta equilibrada, aproximadamente el 60% de los residuos generados a nivel domiciliario son orgánicos. Por lo tanto, el reciclaje a través del compostaje domiciliario implicaría poder reducir la mayor parte del volumen de los desechos que van a los basureros municipales.
Compostar significa someter la materia orgánica(en nuestro caso, restos orgánicos de la cocina y del jardín) a un proceso de transformación natural(en presencia de microorganismos como bacterias y hongos, oxígeno, temperatura y humedad adecuadas) hasta obtener un producto, el compost, de gran calidad como abono orgánico, ya que además de su función como fertilizante, mejora la estructura del suelo.
¿Qué residuos se usan para realizar este proceso?
– Cáscaras, restos de fruta y verduras crudas
– Cítricos y restos de cebollasen pocas cantidades
– Cáscaras de huevos bien trituradas
– Restos de café, té, mate e infusiones
– Cartón, servilleta, papel y diario
– Restos de jardín o poda como flores, hojas, ramas, paja, pasto
Este proceso de compostaje puede realizarse en diferentes tipos de compostadores: abiertos (tipo pila o tipo pozo) o en contenedores (tipo vertical u horizontal). Pueden elaborarse de forma artesanal con los recursos locales disponibles o se pueden comprar.
Estos son algunos de sus beneficios:
– Se obtiene un fertilizante casero útil para las plantas de los jardines y huertas ya que mejora la vida del suelo.
– Disminuye la necesidad de comprar fertilizantes químicos y abonos.
– Se fomenta una conciencia del reciclaje y aprovechamiento de los residuos que producimos.
– Es compatible con las actividades del hogar actual.
También se diferenció compostaje de vermicompostaje, una confusión habitual. El compostaje no requiere la presencia de lombrices, en cambio, si podemos conseguir lombrices californianas podemos llevar adelante un proceso de lombricompostaje para obtener humus, que constituye las deyecciones de las lombrices (evacuado de su tracto digestivo) y contiene cinco veces más nitrógeno, siete veces más fósforo y once veces más potasio que la tierra común.
Además de las lombrices, un sistema de vermicompostaje sano alberga muchos otros organismos, como insectos, artrópodos, hongos y bacterias. Aunque todos ellos desempeñan una función en el proceso de formación del compost, la lombriz es el principal catalizador de este proceso, y requiere para su supervivencia determinadas condiciones de temperatura (21 – 25 ºC) y humedad.
Para más información:
- Agencia de Extensión Rural Santa Rosa
- Teléfono: (02954) 431976
- Dirección: Av. Spinetto N° 785