Este martes en una asamblea anual ordinaria se decidió que el actual presidente del Instituto de la Carne Vacuna (IPCVA), Ulises «Chito» Forte, continúe al frente de dicha entidad por los próximos dos años, según pudo averiguar La Política Online.
La reelección de Forte se definió por unanimidad en las oficinas que el IPCVA tiene en microcentro porteño en el marco de una evaluación de sus tareas realizadas durante su primer mandato y la aprobación de una memoria, balance y plan anual operativo.
En este caso las cuatro entidades -Federación Agraria, CRA, Sociedad Rural y Coninagro- se pusieron de acuerdo con los representantes de los frigoríficos para que Mario Ravettino, del Consorcio de Exportadores ABC, siga como vicepresidente.
Así, el IPCVA seguirá en manos de Federación Agraria dado que Forte proviene de esa entidad, fue vicepresidente en la gestión de Eduardo Buzzi en pleno conflicto con el kirchnerismo lo que le permitió llegar a ser electo diputado por la UCR en 2009.
«Veníamos de la era del ‘no se puede’, después pasamos al ‘quizás se pueda’ y hoy no hay más excusas. Se acabó la transición. Tenemos todo para trabajar a fondo y crecer. Y lo vamos a hacer», aseguró Forte en la torre de la calle Esmeralda.
«Tenemos un gran desafío por delante tanto en el mercado interno, del que todos saben que soy un gran defensor porque nadie desprecia a su mejor cliente, como en el mercado internacional», agregó el dirigente pampeano en un centro a los exportadores.
Las otras tres entidades rurales, los frigoríficos y el Estado nombraron a los consejeros titulares. Estos son José Grigera Naón (SRA); Gonzalo Álvarez Maldonado (Coninagro), Jorge Grimberg (CRA), Jorge Torelli (UNICA), Miguel Schiariti (CICCRA) y Guillermo «Willy» Bernaudo (Ministerio de Agroindustria).
Indicadores en alza
La reelección de Forte se da en medio de un «boom ganadero» en el que la mayoría de los indicadores del sector están en alza a partir de la eliminación de retenciones y la liberación de las exportaciones que hicieron que los productores vuelvan a invertir.
Según un informe elaborado por la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (CICCRA), el consumo interno de carne vacuna aumentó un 9,2% en los últimos 12 meses alcanzando un promedio que ronda los 58,8 kilos por habitante por año.
El aumento del consumo se explica básicamente porque el precio de la carne vacuna viene aumentando por debajo de la inflación en los mostradores de las carnicerías y supermercados, mientras en carne aviar, por ejemplo, ocurre todo lo contrario.
En los primeros dos meses de este año, se registró un aumento del 1,7% en los principales cortes vacunos, versus una inflación -medida por el INDEC- superior al 4%. En tanto, en el último año la carne subió un 21,3% contra casi 25% de inflación.
En tanto, en el primer bimestre del año, la participación del consumo interno en el total de la producción cárnica es del 88,5%, debido al aumento de las exportaciones (este año nuestro país exportará unas 400.000 toneladas por el aumento de las compras de China).
En las principales cadenas de supermercados de la ciudad de Buenos Aires -sin contemplar ofertas- es posible encontrar el kilo de Picada a un precio de $ 56,52; el kilo de Nalga a $ 109,90; el kilo de Roast Beef a $ 112,90; y el kilo de Paleta a $ 129,90.
En esta línea; el kilo de Colita de Cuadril se comercializa a $ 184,90; el kilo de Lomo a $ 255,90; el kilo de Bife de Chorizo a $ 230,90; el kilo de Vacío a $ 205,90; el kilo de Peceto a $ 230,90; el kilo de Tapa de Asado a $ 116,90; y el kilo de Bife a $ 154,90.
Un dato no menor es que en febrero el precio de la hacienda en pie en el Mercado de Liniers mostró una suba del 8% en relación al mes de enero. Este aumento no se trasladó en su totalidad a las carnicerías por la influencia de la exportación.
Por otra parte, en el primer bimestre de este año la industria frigorífica faenó un total de 2,1 millones de cabezas, una cifra un 11,8% superior a igual periodo de 2017. En la actualidad el stock vacuno nacional se ubica en torno a las 55 millones de cabezas.
FAA con Marcos
La cúpula de FAA encabezada por Omar Príncipe se reunió este martes con el jefe de Gabinete Marcos Peña en la Casa Rosada en un encuentro del que participaron Luis Miguel Etchevehere, Javier González Fraga, Leandro Cuccioli y Santiago Hardie.
La reunión se produjo en respuesta al pedido de audiencia elevado por el Consejo Directivo Central de FAA donde se analizaron los diagnósticos realizados en las distintas asambleas llevadas a cabo en el interior del país.
«Les transmitimos a los funcionarios las demandas de los pequeños y medianos productores, tales como la necesidad de acceder a financiamiento con tasas de interés blandas o cero y de poder refinanciar las deudas», señaló Príncipe.
«También pedimos la quita de retenciones a la soja porque miles de productores, sin medidas extraordinarias no van a poder sostenerse», indicó el presidente de FAA, y agregó que «solicitamos que se suspendan por un tiempo las intimaciones».
Príncipe afirmó que hay estimaciones que indican que la Argentina no va a superar los 40 millones de toneladas de soja, lo cual implica entre 14 y 15 millones de toneladas de pérdida, y se traducen en alrededor de 5 mil millones de dólares.
«A nosotros nos preocupan esas cifras en términos de los miles de productores que ante esta situación extraordinaria, que están cosechando muy pocos quintales por hectáreas, lo cual puede implicar que puedan desaparecer», concluyó.