Mientras Brasil bate un nuevo récord en los embarques de carne con destino a los mercados externos, Uruguay sufre un retroceso de 18% y Paraguay habilitó la faena de vacas y vaquillonas con destino a la exportación.
Entre los competidores de los países del bloque del Mercosur, Australia ve como se derrumba el mercado externo con caídas del 9%, mientras Estados Unidos espera una definición de Taiwán, que tiene previsto allanar el camino para que las carnes del país del norte ingreses a ese mercado asiático.
BRASIL. Los embarques de carne vacuna fresca efectuados por Brasil alcanzaron un nuevo récord de 163 mil toneladas en agosto, según los datos que difundió la Secretaría de Comercio Exterior (SECEX), los embarques de carne vacuna fresca cerraron agosto con un récord mensual de 163,22 mil toneladas, equivalentes a una facturación de USD 654,24 millones.
Según el informe elaborado por Rosgan, el promedio diario de embarques quedó en 7,7 mil toneladas, un incremento del 5,6% comparando con julio y del 26,8% en la comparación con agosto de 2019.
Sin embargo, el valor de la tonelada exportada sigue en baja, registrando en agosto un precio medio de USD 4.008, un 1,8% menos que en julio y casi 4% inferior al registrado un año atrás.
China pasó de comprar 25.000 toneladas a la mitad, Australia está en alertas por la caída de las exportaciones
URUGUAY. En tanto las exportaciones de carne vacuna efectuada por la banda oriental cayeron 18% en agosto. Según los datos del Instituto Nacional de Carnes (INAC), del 1 al 29 de agosto se exportaron 28.241 toneladas peso canal, marcando una caída del 18,4% respecto de igual mes del año pasado y del 16% respecto de julio. Los ingresos totalizaron USD 111 millones, cayendo un 25% frente a un año atrás.
China se mantiene como el principal comprador, pero con una demanda reducida a la mitad, porque pasó de comprar 25.035 toneladas peso carcasa en agosto de 2019, a 12.850 toneladas este año. En tanto, Estados Unidos con 6.776 toneladas, y Países Bajos, con 4.320 toneladas en agosto, impulsan las exportaciones mensuales registrando crecimientos del 70% y 72%, respectivamente, en relación a igual mes del año pasado.
PARAGUAY. Por su parte, el estado guaraní, habilitó la faena de vacas y vaquillonas para la exportación de
carne a la Unión Europea. Después de cinco meses de suspensión de la faena de vacas y vaquillonas con destino exportación para ese mercado, el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (SENACSA) habilitó el procesamiento industrial de las categorías.
Tras confirmarse la aprobación del sistema de trazabilidad del estradiol propuesto por el organismo paraguayo. La normativa sanitaria de la Unión Europea, en línea con la del SENACSA, prohíbe la utilización de esta hormona, comúnmente utilizada para la Inseminación Artificial Tiempo Fijo, en hacienda que se faene para ese destino. En 2019 los frigoríficos habilitados faenaron unos 350.000 animales seleccionados para Europa, de los cuales un 20% fueron hembras
EEUU. Taiwán anunció que flexibilizará las importaciones de carnes. El país asiático allanó el camino para un eventual acuerdo de libre comercio con los Estados Unidos al anunciar una flexibilización de las restricciones a la importación de carne vacuna y porcina de EE. UU a partir del 1 de enero de 2021.
Estados Unidos es un socio comercial “extremadamente importante” para Taiwán quien busca fortalecer los lazos con Washington en un momento de elevadas tensiones con China.
AUSTRALIA. Las ventas de carne vacuna al exterior de Australia se redujeron drásticamente en agosto, en línea con la tendencia a reducir la faena.
Las exportaciones a todos los destinos totalizaron solo 78.021 toneladas el mes pasado, el volumen más bajo en al menos 10 años, registrado para ese mes.
Las ventas externas de agosto cayeron un 27% en comparación con el mismo período del año pasado, lo que equivale a unas 28.000 toneladas menos. A su vez, la cifra de agosto fue un 12% más baja en volumen que las exportaciones del mes anterior.
En lo que va del año, Australia ha exportado 720.486 toneladas de carne vacuna refrigerada y congelada, un 9% menos que en los primeros ocho meses del año pasado. Esa brecha inevitablemente se ampliará aún más en los próximos meses siendo ya muy clara la tendencia a reducir la faena para reconstruir el stock ganadero.