Si a una semilla que ya es por demás pequeña, le sumamos su poca fuerza de emergencia y además la asociamos con una sembradora que no es específica para la siembra de una pastura, de entrada debemos comprender que no estamos trabajando con las mejores condiciones para que esta semilla exprese su máximo potencial. Pero es en lo retoques y configuraciones de esa sembradora, donde se puede establecer un diferencial para una mejor siembra. Así lo manifestó el Ing. Hernán Ferrari, experto en maquinarias del INTA Concepción del Uruguay, en el marco de una conferencia brindada en el primer bloque de las jornadas virtuales TodoAlfalfa en Acción el 18 de noviembre, de la que participaron más de 1.300 asistentes, y que tendrán su continuidad los días 25 del corriente mes y el 2 de diciembre, con más exposiciones vinculadas al cultivo de esta pastura, y a lo que se sumará una Ronda de negocios el día 3 de diciembre. Ferrari, comentó que en un trabajo realizado en esta sede del INTA, se hizo un ensayo sobre cómo se afectaba la cantidad de plántulas logradas en función de la profundidad de siembra. Se evidenció como resultado que si se implanta la semilla a una profundidad que va entre los 0,5 cm y 1 cm, se obtiene hasta el 72% de efectividad de plántulas logradas en función de las semillas viables. Pero llegar a este porcentaje no sólo depende de la profundidad a la que se trabaje con la sembradora, sino de una serie de configuraciones adicionales en el tren de siembra, que permitirían lograr mayores resultados productivos a la hora de implantar la alfalfa. Comenzando por las cuchillas Juegan un rol fundamental, pues son las que van a permitir el corte del rastrojo. “En Argentina se puede decir que el 70% trabaja con la cuchilla de ondulaciones tangenciales simétricas, comúnmente denominada Turbo. Para la siembra de alfalfa esta cuchilla debe tener entre 19 y 23 ondulaciones. No podemos usar esas de 30 a 36 ondulaciones que se usan muchas veces para trigo, porque no logran así hacer una buena microlabranza, necesaria para que después los abresurcos trabajen bien, haciendo el surco de manera estable y uniforme. Si esta microlabranza está mal hecha, la semilla va a ir variando entre 0,5 y 2 cm y luego vamos a tener un mal stand de plántulas logradas”, explicó Ferrari al iniciar su alocución en el marco de la jornada online. En cuanto a la velocidad de siembra, el especialista remarcó que con estas cuchillas, para la siembra de pasturas, no debe ser superior a los 6 km/h, porque sino después, cuando la onda está saliendo, genera un efecto cuchara, lo que hace que se levante el suelo y no quede tierra suficiente para tapar esa semilla, corriendo mucho riesgo de deshidratarse. Otro de los puntos clave de la cuchilla destacado por el especialista del INTA es la profundidad a la cual vamos a colocarla. “Hoy es, a mi criterio, donde cometemos el principal error a la hora de la implantación de una alfalfa. Normalmente colocamos las cuchillas hasta las masas, en profundidad de 8 y hasta 10 centímetros, tratando de solucionar un poco los problemas de compactación, y tenemos que entender que la sembradora no es una descompactadora de suelos. Si tengo problemas de compactación, tengo que solucionarlos en la campaña anterior, con un paratill, un paraplow, un descompactador de brazos o con un cultivo biológico, como una colza, que descompacta suelos molisoles, vertisoles, etc, generando un efecto de mucha porosidad. Si coloco las cuchillas hasta las masas, estoy perjudicando en dos factores claves a la semilla. Una es que así no les llega el agua a tiempo y de manera uniforme, porque al enterrar las cuchillas hasta las masas estoy labrando, cortando el suelo, muy por debajo de la profundidad de siembra, entonces el agua que está ascendiendo, que tiende a evaporarse desde allí, se pierde por capilaridad y la semilla no puedo comenzar su germinación. Además, otro de los problemas que genero al colocar las cuhillas muy profundas, es que empieza a variar la profundidad de siembra, porque esta cuchilla generó grietas dentro del suelo y hace que, si yo quería colocar la semilla a 1 cm por ejemplo, se empiece a encontrar luego con grietas que había dejado la cuchilla, y en vez de colocarla a 1 cm, las coloca también a 1,5 cm, a 2 cm y hasta 5 cm, y esto porque la cuchilla estaba a 6 u 8 cm. Así, estoy perjudicando la siembra de la semilla por todos lados”, remarcó Ferrari. Los días 25 de noviembre y 2 de diciembre, se transmitirán por Streaming HD los 2 restantes Bloques de las Jornadas TodoAlfalfa en Acción. El programa de conferencias y como inscribirse, ingresando aqui Es por todo lo mencionado, que el profesional aclara que la cuchilla debe ir regulada a 1 centímetro por debajo de la profundidad de siembra, para logar así que los factores de siembra sean los ideales. “Solamente regulando la cuchilla de esta manera, logro subir de un 30% – 35% de plantas logradas que tenemos en promedio a nivel país, a un 50% – 55%”, enfatizó. Los discos abresurcos y la necesidad de la “V” perfecta Otro punto clave en la siembra está en los discos abresurcos según Ferrari. “El que predomina es el disco encontrado, el que forma como una “V”. Esta “V” siempre se tiene que encontrarse, porque muchas veces observamos discos donde hay una luz de separación de hasta 1 milímetro y medio, lo cual hace que se genere un surco en forma de “W”, y esto está mal, tiene que ser una “V” perfecta. Si se forma una “W”, empezamos a generar muchos perjuicios a la semilla. Cuando tenemos una “V”, como debe ser, a la semilla le llega el agua en un 75% de su superficie, por lo que germina y emerge mejor. Cuando yo genero una “W”, porque los discos estaban gastados o no los suplementé o acerqué al comenzar la campaña la semilla va a quedar ubicada en una de las patas de la “W” y el agua por capilaridad le va a llegar sólo en un 15% de su superficie, retardando mucho la germinación, la emergencia y generando plantas dominadas y dominantes, por lo que es un defecto que hay que corregir antes de salir a sembrar”. La influencia de la carga, otra limitante La presión que le damos a los cuerpos influye muchas veces también en una correcta siembra, por lo que el especialista en maquinarias de siembra destaca que “tenemos que tratar de darle la mayor presión posible al resorte, al pulmón, al hidroneumático, etc, pero siempre y cuando la rueda limitadora de profundidad no deje huellas”. Frente a esto, aclaró: “Debo darle presión para que se mantenga estable y que no me varíe la profundidad, pero si me excedo de presión donde dejó huella, germinará y emergerá primero, porque la huella le hace un efecto esponja, lo que hace que a la semilla le entre el agua más rápido apretando al costado del suelo, pero después, cuando quiere desarrollar su crecimiento inicial, que en la alfalfa es lento, si yo le apreté las paredes laterales, cuando quiera desarrollar sus raíces no lo va a poder hacer porque tendrá las paredes laterales compactadas, no podrá captar aguas ni nutrientes y sólo podrá ir hacia abajo. En cambio, cuando yo le doy la carga justa, es decir, la mayor carga posible pero sin dejar huella, las raíces podrán expandisrse correctamente y así duplicar el desarrollo inicial de la planta”. En la actualidad hay muchos desarrollos que ayudan a mejorar este problema, como los pulmones neumáticos e hidroneumáticos, a los cuales se refirió Ferrari también: “Me permiten poner la carga justa y mantenerla de manera constante en la siembra, independientemente de los relieves que tenga el terreno, y no requiere mucho costo adicional aplicar esta tecnología en lugar de los resortes, porque lo coloco cuando los necesito”, explicó. A la hora de fijar la semilla, también hay aspectos a tener en cuenta Cuándo utilizar la rueda compactadora o la colita de castor, es muchas veces también una disyuntiva según el especialista del INTA. Para él, es preferible utilizar las ruedas cuando se hace siembra de alfalfa primaveral. “Es que es aquí cuando hay una humedad relativa ambiente más baja que en otoño, hay mas vientos, por lo tanto la superficie del suelo está más seca, y la ruda se comporta mejor, contacta mejor con la semilla y hace que esta no descalce fuera del surco; en cambio, en la siembra otoñal, yo prefiero una lengüeta, porque hay mas humedad relativa, hay menos viento y la ruda tiende a pegarse a la semilla y a sacarla fuera del surco, en cambio la lengüeta se desliza sobre la semilla, la contacta en el fondo del surco y esto hace que como una esponja absorba rápidamente humedad y la velocidad de la emergencia se duplique, obteniendo mas plantas logradas. En el único momento en que estas tecnologías no debe estar presente, es cuando tengo una humedad de suelo mayor al 60%”. Como regular las ruedas tapadoras Ferrari aclaró que “en la mayoría de las sembradoras tenemos disponibles dos regulaciones, una de presión de carga, que va a ser en función de la humedad que tenga el suelo y la otra es la regulación del ángulo que le voy a dar a esas ruedas cerradoras de surcos. En el caso de la alfalfa no tienen que tener ángulo de ataque, porque no me tienen que dejar lomo. Si yo le dejo lomo, me aumenta así la profundidad real, por lo que si yo estoy sembrando a 1 cm pero le dejé 2 cm de lomo arriba del surco, en realidad le estoy dejando 3 cm de profundidad, y esa plántula que quiere emerger, no lo va a hacer nunca y vamos a tener muchas plantas muertas, no logradas. Es así que simplemente, hay que dejar las dos ruedas bien paralelas y dándoles presión para que cierren el surco, de esa manera no aumento la profundidad real”. Expresó que lo ideal, sin embargo, sería trabajar con ruedas que no tengan discos dentados y escotados, que simplemente cierren el surco “pero vamos a tener campañas de años Niñas, como ésta, donde si ponemos las ruedas tapadoras sin discos escotados no logramos cerrar el surco porque no le da la presión, entonces necesitamos colocarlos, pero deben ser los discos escotados (en forma de escote); no pueden ser los dentados, porque esos son muy agresivos para la alfalfa, son para maíz. En alfalfa descalzan la semilla, traccionan la semilla, y pierdo así todo lo bueno que preparé antes en la sembradora. Si utilizo los escotados, siempre hacerlo del lado externo, justamente para que no traccionen sobre la semilla y así no pierda capilaridad”. Por último, enfatizó en calibrar bien las ruedas de mando, incluirles tacos, y que estos estén invertidos a como se los coloca en las ruedas del tractor, porque este último tiene patinamiento positivo, y las ruedas de mando lo tienen negativo. También la necesidad de utilizar rodillos dosificadores acanalados, que no sean desplazables en lo posible, ya que no permiten un buen control. También recomendó sembrar la alfalfa en la misma línea que fue abierto el surco, no al voleo; y controlar la manguera de corrugado de bajada, que no tenga grandes ondulaciones, porque sino sembramos de manera despareja. | |
Fuente: TodoAgro