Este lunes se conocieron los datos de aduanas de China. Durante noviembre el gigante asiático habría importado 9,59 millones de toneladas de soja, contra unos 8,28 millones en el mismo mes del año pasado.
Este crecimiento tiene que ver con las compras relacionadas a la Fase 1 del acuerdo de China con Estados Unidos.
Las compras de China también aumentaron contra octubre, cuando la importación alcanzó los 8,7 millones de toneladas.
Un artículo de Reuters agrega que los compradores chinos intensificaron las compras de productos agrícolas estadounidenses, incluida la soja, para cumplir con el compromiso de China en el acuerdo comercial inicial que firmó con Estados Unidos en enero de este año.
Las plantas procesadoras también aumentaron las importaciones de Brasil a principios de año en medio de una constante recuperación de los stocks de cerdos.
De igual manera, los márgenes de procesamiento se debilitaron debido al aumento de los precios de la soja estadounidense, lo que obligó a algunas plantas a cancelar los cargamentos estadounidenses.
Algunas procesadoras en el sur y el este de China han suspendido sus operaciones debido al aumento de los inventarios, según Cofeed, una consultora agrícola. El mercado también está observando de cerca si habría más cancelaciones de acuerdos de soja estadounidenses, ya que los márgenes siguen débiles.
Por otro lado, China importó 775.000 toneladas de carne en noviembre, siendo este volumen levemente superior al del mes anterior, ya que los compradores se abastecieron para los meses de invierno, la temporada alta de demanda de China.
Las importaciones aumentaron un 1,8% desde las 761.000 toneladas de octubre, pero muy por debajo del récord de casi 1 millón de toneladas de julio, según mostraron los datos de la Administración General de Aduanas.
Las importaciones de carne aumentaron este año en medio de una escasez de carne de cerdo en China luego de una gran reducción del stock de cerdos por la letal peste porcina africana.
Las importaciones en los primeros 11 meses alcanzaron los 8,95 millones de toneladas, lo que refleja un aumento del 63% con respecto al mismo período del año anterior.
Sin embargo, los envíos se han desacelerado en los últimos meses a medida que el país reconstruye rápidamente sus cerdos. Además, las medidas para inspeccionar las cargas de alimentos congelados para detectar la presencia del nuevo coronavirus dificultan el despacho de mercancías en la aduana.