La peste porcina africana (PPA) está influyendo activamente en los mercados de carne de cerdo en todo el mundo, creando muchas áreas de incertidumbre, principalmente en China, pero también en Alemania. Las implicaciones de la PPA para el comercio mundial de carne de cerdo son un factor decisivo importante en los mercados mundiales de carne de cerdo, según el informe recientemente dado a conocer por Rabobank.
China es el país más obvio donde la PPA sigue teniendo una gran influencia. Su propagación durante el invierno resalta los desafíos de controlar esta enfermedad y ha complicado el panorama de la oferta y la demanda de carne de cerdo de China. «La PPA está creando una incertidumbre significativa en puntos clave, como el censo de ganado porcino de China y las perspectivas para 2021, especialmente para la población de cerdas reproductoras, pero también sobre la producción de carne de cerdo y los precios de la carne de cerdo de China», explica Justin Sherrard, estratega global de proteína animal para Rabobank.
Si bien Rabobank cree que la oferta de cerdos aumentará en 2021, se espera que los precios fluctúen debido a las incertidumbres del desarrollo de enfermedades, los intereses de repoblación, los costos de alimentación y las políticas de importación. “Nuestra opinión es que los precios promedio del cerdo en 2021 serán más bajos que en 2020 y estarán sujetos a fuertes altibajos durante el año”, dice Sherrard.
Dado que se espera que la economía de China se recupere aún más de los impactos de la covid-19 en 2021, esto hará que crezca la demanda de carne para el canal foodservice y el consumo institucional, así como el consumo de los hogares. A medida que los precios de la carne de cerdo se debiliten desde los altos niveles de 2020, recibirán apoyo de una mejor demanda, como se puede ver en la imagen que ilustra la noticia.
En el caso de Alemania, la presión constante de la propagación de la peste porcina africana también es significativa y, aunque se ha avanzado en la contención de la enfermedad, se necesita trabajar más fuertemente en este área.
La situación en Alemania también tiene implicaciones para otras partes de Europa según Rabobank. «Después de que se confirmara el brote de peste porcina africana en Alemania en septiembre de 2020, diez países impusieron prohibiciones de importación de carne de cerdo alemana, incluidos China, Japón y Vietnam, dejando alrededor de 70.000 toneladas métricas adicionales de carne de cerdo en el mercado de la UE cada mes», según Sherrard.
Aunque varios países como Vietnam relajaron recientemente las prohibiciones de importación de carne de cerdo alemana, la prohibición de importación de China probablemente permanecerá vigente durante el primer semestre de 2021 como mínimo, ya que la situación aún está evolucionando.
El brote ya ha tenido un impacto significativo en las importaciones de lechones y cerdos vivos a Alemania, y es probable que continúen las menores importaciones de animales vivos en 2021. De septiembre a noviembre de 2020, las importaciones de lechones de Dinamarca y los Países Bajos, los dos principales proveedores de lechones, disminuyó un 25% y un 31% respectivamente en comparación con el mismo período de 2019. Esto representa un total de 0,7 millones menos de cabezas importadas a Alemania, aproximadamente el 1% del total de animales sacrificados en 2020.
Por todo ello, las implicaciones de la PPA para el comercio mundial de carne de cerdo son un factor decisivo importante en los mercados mundiales de carne de cerdo. La creciente demanda de importaciones de carne de cerdo y otras especies de China fue un importante impulsor de la demanda en los mercados mundiales de proteínas animales en 2020, pero Rabobank anticipa que las importaciones de carne de cerdo de China disminuirán en 2021.
“Al mismo tiempo, vemos que todos los países exportadores buscan mantener el comercio con China. El precio será un factor importante que determinará qué países mantendrán altos flujos comerciales de carne de cerdo hacia China en 2021, junto con la disponibilidad y las consideraciones geopolíticas”, concluye Sherrard.
