El presidente de la Cámara Argentina de Feedlot, Juan Eiras, sostuvo que la ocupación de los corrales de engorde de vacunos se ubica en un 50 por ciento de la capacidad instalada y consideró que la recuperación en el primer semestre estará afectada por la suba en el precio de los granos, la baja demanda de consumo y los altos precios de los animales.
El dirigente y productor ganadero no ve en corto plazo una baja «importante» en la cotización de los terneros, ni tampoco en el valor de los granos.
“Vemos el primer semestre jugado a estos niveles de oferta y no vemos para nada un reacomodamiento a la baja en el precio. Sí entendemos que la cadena comercial puede buscar situaciones donde puede ubicarla (la carne) en valores más racionales, como muchas cadenas de carnicerías y supermercados lo hacen, pero desde la producción no veo en el animal una baja. Después, depende de la economía en su conjunto”, destacó Eiras, en declaraciones a la agencia Télam.
Tensiones
Sobre las posibles soluciones a la coyuntura, el titular de la cámara de feedloteros admitió que el tema de la alimentación no tiene salida a mediano plazo.
“No se ve ninguna alternativa. En el caso del valor del ternero, entendemos que con el correr de la zafra (que comienza en estos días), que es cuando se vende la mayor cantidad de hacienda que el criador tiene, va a depender mucho de la necesidad de venta (del productor). La oferta va a ser suficiente, porque hay 14 millones de terneros para comercializar. Ahí no está el problema; sí se presenta cuando se adquiere como reserva de valor”, reconoció.
Sobre las chances de que siga subiendo el precio de la invernada y de la carne al mostrador, Eiras dio su visión. “El precio de la invernada lo vemos estabilizado y tendría que tener a la baja leve. El precio del animal gordo lo va a determinar la oferta y la demanda. En los próximos tres meses sabemos que esa oferta va a ser baja, y que la demanda también está baja”, observó.
Según su razonamiento, una suba de 10 pesos por kilo vivo en el valor del novillito acomoda las cuentas del feedlot. “Esos 10 pesos tendrían que significar al mostrador 30 pesos, pero Argentina no funciona así. Se pueden convertir en 80 pesos”, advirtió.