El objetivo es dar visibilidad a los sistemas ganaderos de diferentes especies que cumplan con el marco normativo provincial para poner en valor los cuidados del ambiente, el bienestar animal y la sociedad. “Los trámites se harán online, las tasas tendrán costo cero y los productores chicos podrán adecuarse en forma sencilla y con asistencia oficial”, plantea Catalina Boetto, Secretaria de Ganadería.
Aunque muchos ganaderos cordobeses de diferentes especies, tamaños y grados de intensificación llevan adelante planteos respetuosos con el medio ambiente, muy pocos han validado estas acciones de acuerdo al marco legal vigente en la provincia que busca producir proteína animal con el menor impacto posible sobre el hábitat, el territorio y la comunidad, en especial la de pueblos cercanos.
La provincia de Córdoba cuenta con casi 30 mil establecimientos ganaderos de bovinos porcinos, aviares, ovinos y caprinos, de los cuales unos 10 mil son considerados intensivos por ley y, entre ellos, sólo 500 han presentado la documentación para la auditoría de cumplimiento.
“Cuando asumí, advertí esta situación y analizamos con mi equipo las razones de la problemática y cómo revertirla. Este trabajo nos llevó un año y medio, lo realizamos con distintos actores públicos y privados, y juntos desarrollamos el Programa de producción sustentable que pondremos en marcha a la brevedad”, dijo a Valor Carne, la Ing. Agr. Catalina Boetto, Secretaria de Ganadería de la Provincia.
El marco legal provincial está dado por la Ley Nº 9.306 de Regulación de los sistemas intensivos y concentrados de producción animal, la Ley Nº 10.208, de Política ambiental y el Decreto Nº 847, de Preservación de recursos hídricos, referido al agua que ingresa a los sistemas productivos y a sus efluentes.
La funcionaria sostiene que “este paquete normativo es adecuado para una ganadería moderna y eficiente, pero resulta de difícil abordaje por parte de los productores, sea por requisitos engorrosos o por costos. Por eso nos propusimos simplificarlo para que todos puedan acceder a la licencia sin bajar la vara de la sustentabilidad”, planteó. Y subrayó que “esto nos permitirá tener acceso a información para diseñar políticas públicas con impacto positivo en la producción y en la sociedad”.
Del dicho al hecho
El Ing. Agr, Carlos Ferrari, asesor de la Secretaría, trabaja facilitando el proceso de diseño y puesta en marcha del programa para ayudar a los productores a obtener la licencia.
“Si bien las normas son correctas, a veces, las formas de cumplimiento son complicadas. Por ejemplo, presentar los mismos papeles en diferentes organismos, con firmas de muchos profesionales, certificadas por sus Colegios, implica gastos excesivos para el productor medio y chico”, indicó, apoyándose en su experiencia privada con empresas rurales.
En tal sentido, muchos establecimientos grandes están en condiciones de cumplir ya que cuentan con recursos económicos y competencias técnicas como para adoptar las prácticas necesarias, pero los medianos y chicos, no tienen esa posibilidad. “Sin embargo, sus productos llegan al supermercado o al mercadito y la idea del programa es que la carne y la leche de todos los campos tenga la misma trazabilidad ambiental”, subrayó Ferrari.
Y agregó: “entendemos que un programa sustentable, plasmado en una licencia, no sólo atañe a las producciones intensivas, sino que debe abrir el juego a todos los sistemas ganaderos, incluso los más extensivos, de modo que también puedan mostrar al consumidor que producen cuidando el medioambiente y las personas”.
Así las cosas, desde la secretaría de Ganadería se planteó que no eran los únicos que debían fijar cómo aplicar las normativas y comenzaron a hacer reuniones para acordar posibilidades de acción con la Secretaría de Ambiente, la Administración Provincial de Recursos Hídricos, INTA, SENASA, Universidades de Córdoba, cámaras de productores y sociedades rurales, entre otros. El objetivo consensuado fue ayudar a los establecimientos que producen proteína animal para que, con menos inversión, menos costos y trámites más sencillos, pudiesen adecuarse a la normativa vigente acompañándolos en los procesos.
“Una vez que tuvimos el proyecto de producción sustentable por escrito hicimos una encuesta abierta a todos los ganaderos de Córdoba. Tuvimos numerosas respuestas y un abanico de propuestas prácticas para ajustar la reglamentación final”, contó Ferrari.
El paso a paso
La tarea de la Secretaría comenzó a principios del 2020 caracterizando y segmentando los diferentes tipos de producciones, no solo la bovina sino de todas las especies, así como los requerimientos de cada sistema para el cumplimiento de las normativas vigentes. Se diferenciaron los productores por su escala y por el potencial impacto ambiental de sus planteos.
Un aspecto que facilitará la inscripción en el programa es que se dispondrá de una mesa de entrada única de producciones sustentables y los trámites se realizarán de manera virtual, con expediente digital.
“El productor no tendrá que venir a la ciudad de Córdoba, podrá completar los requisitos en forma online. Además, proponemos disminuir los costos para lograr mayor cantidad de inscripciones”, aseveró Ferrari, detallando que, una vez obtenida la licencia, deberán validarla cada tres años, como cualquier certificación.
Desde el sector oficial se buscará acompañar a los productores con financiamiento preferencial. “Queremos hacer convenios con entidades crediticias de modo que aquél que obtenga la licencia pueda acceder a una tasa diferencial para seguir avanzando en ganadería sustentable”, anticipó Boetto.
Por último, la funcionaria destacó que el programa de la provincia de Córdoba es pionero a nivel nacional. “Me gustaría compartir la idea que surgió del trabajo realizado entre todos los actores: un sello de calidad indicando que el producto exhibido en la góndola proviene de un campo amigable con el ambiente y con los animales nos dará la posibilidad de que la sociedad conozca y valore que estamos haciendo las cosas bien”, finalizó.
Por Ing. Agr. Liliana Rosenstein, Editora de Valor Carne