Se realizarían asignaciones a los exportadores teniendo en cuenta una faena nacional de 140 mil animales de la categoría hasta el 31 de diciembre próximo. Primero buscarían resolver el caso de frigoríficos que quedaron fuera de las cuotas actuales. En tanto, la apertura sigue pendiente.
Cuando ya pasaron cuatro días del plazo anunciado por el ministro de Agricultura Julián Domínguez para la apertura de exportaciones de carne de vacas conserva por fuera del cupo actual, en las últimas horas surgieron rumores sobre nuevos condicionantes para su implementación.
Según pudo reconstruir Valor Carne a través charlas con fuentes del ministerio de Agricultura y dirigentes de entidades que participaron en diferentes reuniones, el Gobierno estaría trabajando en la asignación de nuevos cupos hasta completar la faena de 140 mil vacas de las categorías D y E.
Hay que decir que, más allá de que en los oídos de los productores los anuncios de Domínguez sonaron a “liberación total de la vaca conserva”, el textual del acta acuerdo firmada ese día por el ministro, gobernadores y la Mesa de Enlace dice otra cosa.
Sostiene que el ministro Domínguez “accedió a la petición de los Señores Gobernadores y de la Comisión de Enlace y se compromete a autorizar la exportación de las categorías de vaca conserva o manufactura D y E, hasta liquidar stock al 31 de diciembre”.
Traducción: la liberación de la vaca conserva regiría solamente para los 140 mil animales de la categoría que, según los números oficiales, están en los campos.
¿Cómo sería el mecanismo de liberación? Si bien en Agricultura no lo confirman, la idea es establecer nuevos cupos entre los exportadores. Y ahí estaría el verdadero motivo de la demora en la publicación de la resolución en el Boletín Oficial.
Ante el pedido de explicaciones al respecto, desde el ministerio de Agricultura mandaron el siguiente mensaje a este medio: “La subsecretaría Administrativa está ultimando los detalles respecto a la firma del acta del Consejo Federal de Ministros Agropecuarios atento a la solicitud de brindar una solución federal de los temas planteados por los gobernadores que avalen mediante constancia escrita la incorporación de las plantas que habían hecho nuevas inversiones y piden ser contempladas para armonizar las capacidades productivas y exportadoras del país. Se recuerda que el pedido es sobre vacas conserva categoría D y E”.
Traducción 2: Para que nadie se quede afuera de las nuevas exportaciones de vaca conserva, primero se debe resolver la situación de aquellos frigoríficos que, por no tener historial de exportaciones en el segundo semestre de 2020, no recibieron cupos en el reparto realizado en junio. La información sobre estas plantas debe ser enviada por los gobiernos provinciales.
Pero, si la liberación de las nuevas vacas es total ¿para qué se necesitan nuevos cupos?
Aunque en Agricultura no tienen respuesta a esta duda, fuentes de las entidades entienden muy bien esta necesidad. En la última reunión que mantuvieron, junto a exportadores, con el Gobernador Axel Kicillof la semana pasada, quedó sobre la mesa la idea de asignar cupos para los nuevos embarques de vaca conserva.
Más allá de la polémica desatada sobre cuántas vacas de descarte quedan en los campos, analizada la semana pasada por Valor Carne, lo concreto es que los funcionarios de Agricultura trabajan sobre la exportación de un volumen acotado, lejos de la liberación total dada a entender hace poco más de una semana.
En otras palabras, los cupos son una forma de controlar que la exportación no exceda a ese número imaginario establecido por el Gobierno.
Qué pasará con stock anterior
Esta semana, el secretario de Agricultura, Jorge Solmi, se refirió a la demora en la publicación de la resolución.
En una entrevista en radio La Red, ante la consulta sobre si se iba a priorizar la carne de las nuevas faenas por sobre la stockeada, Solmi afirmó: “Estamos trabajando en eso. La realidad es que el planteo que tuvimos de las entidades, validado por el INTA y las universidades, apunta a unas 140 mil vacas que están sin faenar. La idea primaria era abrir primero lo nuevo y luego veremos como ir resolviendo otros esquemas. El enfoque del trabajo era ir por lo nuevo”.
En tanto, sigue la incógnita sobre lo que sucederá después del 31 de diciembre. “Eso lo dirá la parte técnica del ministerio”, manifestó Solmi.
“Nosotros tenemos claro que eso dependerá de lo mismo que sucede con los granos, como en cualquier país que elabora planes de trabajo. Australia, que tanto la miramos como paradigma de la producción ganadera, anunció que se retiraba del mercado con 150.000 toneladas porque a través de los incendios y las crisis que tuvo había perdido muchos vientres. Y el Gobierno dejó de exportar para recuperar su stock”, afirmó a modo de ejemplo.
Esa será la próxima batalla: qué hacer con las exportaciones en 2022, partiendo del límite que impuso el ministro Julián Domínguez: “Un modelo de ganadería sustentable no resiste más del 24% de exportaciones”, afirmó.
Según explican alrededor del funcionario, se quiso referir a las posibilidades de producir carne a partir del actual stock, teniendo en cuenta un consumo per cápita de 50 kg anuales. Dicho de otra forma, de aumentar la producción de carne, el porcentaje a exportar podría ser mayor.
Pero ese es otro debate, el que comenzará cuando termine el de la “liberación” de la vaca conserva.
Por Marcos López Arriazu, Jefe de Redacción de Valor Carne