Los parámetros fijados por el ministerio de Agricultura le dan una relevancia inédita al valor promedio de las exportaciones de cada empresa. Si bien se busca premiar a las firmas que venden mejor, podría distorsionar y afectar el desempeño global en ese mercado.
Por resolución 266, el ministerio de Agricultura fijó los criterios para la distribución de la cuota de 20 mil toneladas anuales a Estados Unidos, cuyo ciclo comercial es igual al del año calendario.
Tras varios años en que se asignaba de acuerdo al principio de “primero llegado, primero servido”, se definieron los parámetros para el próximo trienio (2022-2024).
Un 90% de la cuota se distribuirá entre frigoríficos, 5% entre grupos y asociaciones de productores y 5% para postulantes nuevos.
En los dos primeros casos, se aplicará el siguiente criterio:
1- 50% se distribuirá de acuerdo a la participación de cada uno en las exportaciones totales de carne vacuna, excluyendo a los embarques dentro del contingente de carne para EE.UU., medidas en valor.
2- 25% de acuerdo a la relación entre el precio promedio de exportación de la carne de cada interesado, de los envíos a todo destino excepto de sus envíos dentro de la cuota de EE.UU. y el precio promedio general para el conjunto de empresas.
3- 25% del mismo modo, pero sólo considerando los embarques a ese destino.
Este cálculo se hará para cada uno de los tres años previos, ponderando 50% al último, 30% al anterior y 20% al más lejano.
De esta sumatoria se obtendrá lo que corresponda a cada exportador.
Ninguna empresa ni grupo empresario puede recibir más del 10% del tonelaje reservado para cada segmento y ninguna puede recibir menos de 50 t (industria) ó 12 t (grupos).
En el caso de postulantes nuevos, habrá un cupo de 200 t para plantas ciclo I o completo y 100 t para plantas de ciclo II. En el caso de grupos, este volumen será de 20 t.
También habrá un fondo de libre disponibilidad que se formará con lo que sobre del cupo para plantas nuevas, las renuncias y las penalidades y que podrá usarse, en la forma de “primero llegado, primero servido” para aquellas empresas que ya hubieran agotado la cuota asignada.
La norma bajo análisis
Nunca había tenido tanto peso el precio promedio de las exportaciones, en ninguna cuota de carnes distribuida en los últimos 40 años, que acá representa la mitad del total.
Hubo años en que este parámetro se consideró a la hora de distribuir Hilton, pero con un peso mucho menor, nunca mayor a un porcentaje de un dígito.
La virtud de este criterio es que se premia a las empresas que venden mejor o que participan activamente en nichos de mayor precio.
El defecto es que las empresas con mayores volúmenes están más limitadas para que las ventas en nichos representen un porcentaje sustancial.
Habrá que ver si la masiva e inédita ponderación del precio medio de los embarques genera o no alguna distorsión de importancia en el cupo relativo que reciba cada exportador.
Por Lic. Miguel Gorelik, Director de Valor Carne