La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) realizó una prueba piloto de escalabilidad con un vehículo que logra llevar hasta 52 toneladas, que partió desde Bahía Blanca para arribar a Neuquén. La iniciativa, promovida por la institución, fue incorporada recientemente en el decreto 32/2018 y tiene el objetivo de adaptar vehículos para aumentar su capacidad y reducir costos.
La actividad fue propuesta por el Ministerio de Transporte de la Nación y coordinada por el Departamento de Estudios Técnicos de la Federación. Durante la prueba acompañaron a Guillermo Campra, director nacional de Transporte Automotor de Cargas, autoridades de FADEEAC: el tesorero, Matías Belusci; el secretario de Relaciones Institucionales y Prensa, Juan Aguilar; y el protesorero y responsable del área técnica, Cristian Sanz.
Asistieron a la presentación Yanina Praglia, directora de Permisos de la Dirección de Cargas, y Miguel Donadío, presidente del Consorcio de Gestión del Puerto. También fueron de la partida Pablo Etchevarne, presidente de la Cámara de Empresarios del Transporte Automotor de Cargas (CETAC) Regional Sureña e integrante de la Fundación Profesional para el Transporte; Anibal Goichik, de la Cámara de Empresarios Misioneros de Autotransporte de Cargas (CEMAC), y Martín Borbea, de la Primera Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Cargas (PAETAC).
El punto de inicio de la prueba fue Bahía Blanca, donde representantes de Vialidad Nacional y el área de Infraestructura evaluaron, junto a transportistas, el beneficio de carga extra que admite este modelo. Desde allí, el vehículo deberá viajar hasta Añelo, Neuquén. La carga se tomó de la empresa Sea White S. A. ubicada en la rotonda de acceso a Puerto Galván, con la presencia de representantes de las marcas Boero y Di Giglio, que participaron en la fabricación.
«Esta es una de las configuraciones recientemente habilitadas y una de las más competitivas y seguras», destacó Campra. La acción fue la primera en ruta con este tipo de modelos que contó con la articulación de FADEEAC y órbitas del Estado, con el objetivo de potenciar cada vez más el sector y de generar nuevas opciones para que el empresariado pueda defender su competitividad.