La nutrición es uno de los elementos más importantes dentro del sector porcino, ya que la eficiencia con la que estos animales aprovechan los recursos determina su rendimiento productivo, y por ende, su rentabilidad.
Por ejemplo, las materias primas utilizadas en la actualidad se dividen en distintas categorías, es así que tenemos como principales fuentes de energía a cereales como el maíz, el arroz, la cebada y la quinua. Y subproductos adicionales como el salvado de trigo, la papa, la caña y el plátano.
Otros ingredientes empleados también como fuente de proteína serían la harina de alfalfa, el gluten de maíz que son de origen vegetal. Mientras que de origen animal, tenemos la harina de pescado y la harina de sangre, las cuales son mejores fuentes de proteína pero la accesibilidad a estas, es más restringida. Otras fuentes adicionales serían la soya, el algodón, el ajonjolí, el girasol y el cártamo.
A pesar de todos estos nutrientes, se hace necesaria la búsqueda de nuevos ingredientes de cultivo más sostenibles y eficientes desde el punto de vista nutricional debido a que la demanda de alimentos y agua es cada vez mayor.
Según un estudio, los ingredientes que veremos en los piensos del futuro son:
ALGAS MARINAS
Debido a que su cultivo no requiere del uso de fertilizantes, agua dulce o pesticida; ya que solo necesitan 1/6 de la superficie utilizada para el cultivo de plantas terrestres. Además, su estructura coloidal les permite una mayor retención de agua, obteniendo sus nutrientes a través de las raíces. Las algas absorben los nutrientes a través de toda su superficie, aumentando su productividad.
En cuanto a su valor nutricional, las algas son ricas en minerales, fibra, proteínas, vitaminas y lípidos. Por ello, se plantea su uso como fibra complementaria junto con otros prebióticos. Entre sus efectos beneficiosos para la salud, se ha demostrado que estimulan la inmunidad innata y tienen propiedades antiinflamatorias.
INSECTOS
Son otros de las grandes novedades que se están abriendo camino en el sector de la nutrición animal. Los insectos han demostrado ser una fuente de proteína de alta calidad, eficiente y sostenible. Entre los insectos que se están barajando para la producción de alimentos, destacan:
- Mosca soldado negra (Hermetia illucens).
- Mosca doméstica (Musca domestica).
- Gusano de la harina (Tenebrio molitor).
Una ventaja interesante del uso de los insectos en la nutrición animal es su contribución a la economía circular, ya que en su crianza a gran escala se pueden aprovechar los residuos orgánicos, lo cual resultaría en una estrategia sostenible de gestionar los residuos.
Solo queda esperar y ver si estos y otros ingredientes alternativos conseguirán desbancar a las actuales materias primas, y si se logrará establecer una producción global más eficiente y sostenible para las generaciones venideras.
Además, según este informe, el ingrediente ideal del futuro debería cumplir ciertas condiciones tales como:
- Producción sostenible, cumpliendo con la normativa medioambiental y con las exigencias de los consumidores.
- Precio asequible para poder competir con los ingredientes actuales.
- Contenido proteico moderado-alto, con una buena digestibilidad y con un perfil de aminoácidos equilibrado.
- Contenido relativamente alto de micronutrientes relevantes.
- Propiedades beneficiosas para la salud: ya no solo buscaremos que los alimentos sean nutritivos, sino que tengan otros efectos beneficiosos para la salud de los animales (favorecer el equilibrio de la microbiota intestinal, estimular el sistema inmunitario, etc.).