Una delegación de Federación Agraria encabezada por su presidente, Omar Príncipe, y el responsable de la Comisión de Semillas FAA, Jorge Solmi, fue recibida en el Congreso de la Nación el miércoles 18 de julio, junto a otras entidades vinculadas a la cadena semillera, por Atilio Benedetti, titular de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados. Junto a FAA, asistieron la Federación Argentina de la Ingeniería Agronómica (FADIA), la Cámara Argentina de Semilleros Multiplicadores (CASEM), la cooperativa Agricultores Federados Argentinos (AFA) y la Federación de Cooperativas Federadas (FECOFE).
Se le transmitió a Benedetti que en 2016 FAA presentó un proyecto de Ley elaborado por la entidad, junto a todas las entidades que integran su Comisión de Semillas, muchas de las cuales estuvieron presentes en la reunión de hoy. Ese trabajo refleja no sólo una experiencia histórica de los productores y de las instituciones mencionadas, sino la visión de juristas y expertos en la materia. Los tres puntos centrales de dicha iniciativa, están vinculados a que la discusión por Semillas pertenece al orden público, a que se debe respetar el derecho al uso propio por parte del agricultor y a que la tecnología se pague en la bolsa. También se pudo transmitir al diputado cuáles serían las implicancias de avanzar con un régimen como el propuesto por Bayer/Monsanto, que es principalmente el que toma la propuesta elaborada por Agroindustria.
Se expuso que se viene trabajando hace años en este tema. Que no es verdad que haya un proyecto de mayoría y otro de minoría, como se intenta instalar tanto en el ámbito político, como en la opinión pública. Se explicó que el trabajo presentado por el Ministerio de Agroindustria de la Nación, de la mano de Luis Miguel Etchevere y su Jefe de Gabinete, Santiago del Solar Dorrego, refleja una parte reducida, sólo con la visión de obtentores, exportadores y en el medio de la cadena, si se quiere, de los productores. Pero no de técnicos, de las cooperativas, de los semilleros multiplicadores o de instituciones que trabajan, por ejemplo, en la pureza y la variedad de las semillas, pero que nunca fueron convocadas a dar a conocer su punto de vista, pese a ser parte importantísima de la cadena y a su importancia agronómica.
“Nos llevamos el compromiso de Benedetti de incorporar todas las voces y que se darán el tiempo necesario para que sea un debate amplio”, coincidieron los presentes al finalizar el encuentro.