En medio de un escenario económico complejo los inversores buscan refugios seguros para proteger su capital. Desde el sector inmobiliario destacan que actualmente hay una tendencia a nuclear la actividad productiva en campos cercanos.
Ante el actual escenario económico, el sector inmobiliario se ha destacado como una opción atractiva para aquellos que buscan estabilidad y rendimiento en sus inversiones. En particular, la compra y venta de campos y estancias se presenta como una inversión eficaz.
La propiedad de tierras en Argentina ha sido históricamente una reserva de valor, y en tiempos de volatilidad económica, los campos representan una sólida oportunidad de inversión.
Actualmente el termómetro económico muestra signos de movimiento en el mercado de campos y estancias. La demanda de tierras está en aumento, y esto puede atribuirse a la confianza de los inversores en el futuro del país y en la estabilidad a mediano y largo plazo que ofrecen las inversiones en tierras, dentro de una economía volátil.
En este contexto, desde una reconocida firma inmobiliaria, señalan algunas tendencias que vienen observando en el mercado.
“Hoy diría que el 80% de los que están comprando son productores de campos cercanos, nos ha pasado con clientes que tienen varios campos y venden uno que les queda lejos para comprarse uno cerca, entonces están empezando a nuclearse”, indicó Federico Nordheimer, CEO de Nordheimer Campos y Estancias.
Desde la firma destacan igualmente, que también hay una movida interesante sobre las posibilidades de mudarse a zonas más alejadas de las capitales: “El tema chacras y lugares cercanos en 100 km o 150 km de las principales ciudades también hoy está generando mayor interés. No solo en Buenos Aires sino en Rosario, Córdoba o en la Patagonia ha habido movimientos, entonces hay un sector de chacras que también está comprando por irse a vivir a zonas más relajadas. Además, gracias a la fuerza que tiene el turismo rural, hay diferentes posibilidades de negocio.” explicó Nordheimer.
Actualmente, los campos en zonas como Pergamino, Santa Fe, Balcarce y Tandil, han mantenido su valor y, en algunos casos, han experimentado un aumento significativo. La demanda constante de tierras de calidad y la estabilidad relativa de los valores en comparación con otros activos han contribuido a esta tendencia. No obstante, la disponibilidad de campos de calidad puede ser limitada, lo que ha llevado a una dinámica de aumento de precios debido a la escasez de oferta en zonas que son naturalmente excelentes para la agricultura y la ganadería.
Asimismo, en el sector ganadero, se observan buenas oportunidades de inversión, especialmente en el uso de tecnología para mejorar la producción y la eficiencia. Ahora con las bombas solares, que ayudan principalmente a las zonas semiáridas, el tema de sacar el agua y realizar los pastoreos es mucho más fácil y eficaz. Esto sugiere un potencial significativo para aquellos interesados en campos ganaderos y negocios mixtos.
Deja una respuesta