La Ley de Semillas traería beneficios para productores, empresas y ayudaría a competir con Brasil y los Estados Unidos en ese rubro.
Para Marcos Quiroga, Director global de Investigación Grupo DONMARIO , es una complicación no contar con una nueva Ley: “Cuando se mira la soja en el mundo Argentina es un problema. Acá, puntualmente, el tema es bastante crítico. A un grupo como DONMARIO le costaría hacer el nivel de inversión que hace en Argentina si no hubiera logrado la expansión que logró”, expresó Quiroga en su vista a los estudios de Infobae.
El proyecto de Ley de Semillas tiene un futuro incierto. Distintos sectores del agro proponen modificaciones y todavía no se ha logrado un consenso que permita avanzar y sobre terreno firme.
“Si llegamos a este momento sin una nueva Ley de Semillas, el gran perdedor es el productor. La inversión medida en dólares por hectárea en investigación y mejoramiento genético que hay en Argentina comparada con Brasil y Estados Unidos, nuestros grandes competidores, es muy inferior. Hoy Brasil invierte casi tres veces más y casi cinco veces más por hectárea que los Estados Unidos”.
Sobre si los diputados y senadores han tomado conciencia de la importancia que tiene esta Ley para el desarrollo de la agricultura de nuestro país, Quiroga respondió: “Creo que hay un avance en el tema. Esa conciencia debe ir de abajo hacia arriba, desde los productores, hacia las gremiales y hasta las empresas para que luego el gobierno tome la decisión. Los legisladores saben, pero luego llegas a un punto donde la política grande juega con otras reglas, que son distintas a las que tenemos en nuestro negocio. Pero creemos que esto va a cambiar y trabajamos para que esto cambie”.
Industria semillera
Quiroga sostiene que en la industria de semillas existe en la actualidad una revolución tecnológica definida como una “segunda revolución verde”: “Todos los avances que hubo en el conocimiento de la genética, asociado al procesamiento de datos y a lo rápido que se avanza en las capacidades de obtener información, está creando esta revolución. Desde la genómica, como una forma muy grande para poder atacar y entender en profundidad genes que cuentan con un comportamiento cuantitativo”.
Este avance se desarrolla en medio de importantes movimientos en el mercado de las empresas: “El cambio que hay en este segmento competitivo es brutal. El proceso de consolidaciones es muy fuerte y cada vez competimos con empresas más grandes. Desde lo tecnológico estamos a la vanguardia. Mantenemos reuniones para hacer ‘Imagine Learning’ sobre nuestro germoplasma de soja. Pero el sustrato para todo este trabajo es el conocimiento y la generación de datos a campo”.
Quiroga destaca la gran importancia de la información a la hora de trabajar y mejorar en el rubro de las semillas: “Generar la base de información que tiene el Grupo DONMARIO, a través de más de 300 puntos y 1,5 millón de parcelas por año, con el nivel de calidad que logramos, es lo que nos trajo hasta acá y es lo que en esta etapa entendemos que nos diferencia. Hoy trabajamos con grupos de Argentina, Brasil, Estados Unidos y China, con empresas privadas y estatales, y en todos los casos el insumo más importante son los datos”, concluye.
Fuente: www.infobae.com