El Gobierno de Argentina recalculó las cifras de exportación de carne vacuna y el consumo interno por persona de los últimos 4años, revelando diferencias significativas.
En una revisión metodológica, la Dirección Nacional de Producción Animal de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca ha recalculado las cifras que han impactado tanto en las estadísticas de ventas al extranjero como en la percepción del consumo doméstico.
La revisión, realizada para el periodo 2019-2023, se centró en ajustar la composición de las exportaciones de carne vacuna, considerando cambios en el comercio con China que permitieron la venta de carne con hueso y huesos resultantes del desposte, conocidos como «huesos con carne». Estos productos experimentaron un crecimiento notable en las exportaciones al gigante asiático.
«Su inclusión en el cálculo provocó un número más alto en exportaciones de carne respecto al real, que también afectó el cálculo del consumo interno de carne vacuna que se obtiene por diferencia entre producción y exportación», señaló el comunicado.
Exportaciones de carne vacuna en 2023: un nuevo panorama
Antes de la corrección metodológica, se había calculado que las exportaciones de carne vacuna en 2023 alcanzaron las 963.690 toneladas equivalentes res con hueso.
Sin embargo, después de la revisión, la cifra ajustada se ubicó en 852.806 toneladas, mostrando un crecimiento del 6 % en comparación con 2022 y un aumento del 17 % en relación con 2021. A pesar de estos incrementos, se observó un descenso del 4 % respecto al volumen registrado en 2020.
Un factor destacado en esta revisión fue el crecimiento significativo en las ventas de huesos resultantes del desposte, que alcanzaron 111 mil toneladas peso producto en 2023. La creación de una posición arancelaria específica en marzo de 2021 permitió diferenciar este componente, evidenciando su relevancia en la exportación.
A pesar del volumen de exportación, los ingresos totales por exportaciones en 2023 fueron de 2.655 millones de dólares, marcando una disminución del 19,6 % en comparación con el año anterior, atribuible a la caída de los precios internacionales en un 24 %.
Impacto en el consumo interno: más carne de la que se pensaba
La corrección metodológica también tuvo implicaciones en el cálculo del consumo interno de carne vacuna en Argentina. La ingesta anual por habitante resultó ser un 5 % superior a las estimaciones anteriores, alcanzando los 52,22 kg por habitante en 2023, en comparación con los 49,84 kg originalmente calculados.
Este ajuste revela que la ganadería vacuna ha logrado aumentar la producción en los últimos cuatro años sin afectar el consumo interno, incluso cuando las exportaciones experimentaron variaciones. La transparencia en los números, aunque significó ajustes, proporciona una visión más precisa de la realidad del sector.
Fuente: Contexto Ganadero
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