El panorama que quedó expuesto desde el mismo inicio del I Simposio de Caminos Rurales en esta ciudad es «crítico», según coincidieron productores que padecen este escenario y funcionarios que no alcanzan a dar soluciones. Más del 60% de esa red vial que permite llegar a establecimientos del campo en la provincia está en «regular o mal estado», situación que entienden tiene derivación directa del desgaste por el tránsito periódico, el efecto del clima pero, por sobre todo, la histórica falta de un plan y fondos para su recuperación y mantenimiento.
«Estamos planteando que se avance hacia una equidad de la gente del campo con la de la ciudad y que lo que se paga en impuestos y tasas municipales se traduzca en mejoras reales», dijo a LA NACION Matías de Velazco, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), organizadora de este encuentro.
El planteo de esta reunión, que comenzó esta mañana y tiene más de 300 participantes de ambas provincias, suena a grito común ante las duras dificultades que afrontan en la labor diaria. Pero que deriva en otras consecuencias aún más dramáticas. «Aquí además de la producción está en juego el arraigo en el campo, con familias complicadas por los problemas de caminos viales y otros servicios imprescindibles», recalcó de Velazco.
Los organizadores lograron la presencia de varios funcionarios, entre ellos el ministro de Agroindustria bonaerense, Leonardo Sarquís, que enfatizó el compromiso de su cartera para involucrarse por primera vez con un área ajena, como es la del transporte.
«En los próximos dos años vamos a arreglar 12.000 de los 105.000 kilómetros de caminos rurales que tiene la provincia», aseguró. Agregó que representa una inversión que ronda los 900 millones de pesos y prometió tener listo el primer tercio de la obra comprometida antes de fin de año.
Algo más optimista es el panorama en la provincia de La Pampa, que tiene apenas unos 20.000 kilómetros de caminos rurales, pero también un presupuesto acotado para este rubro, con unos 40 millones de pesos anuales. «Buscamos la mejor manera de repartir esa torta y que se ejecute en su totalidad», explicó al auditorio el titular de la Dirección de Vialidad Provincial de La Pampa, Jorge Etchichury.
En ambas jurisdicciones reconocen la misma situación. Según lo establecido por la ley 13.010, son los municipios los responsables de afrontar las obras viales con los recursos que les derivan las administraciones superiores. «Ellos cobran tasas y deben usarlas bien», insistió Sarquís.
De todos modos, el gobierno bonaerense describió aquí su plan para reparar casi la mitad de los considerados caminos troncales, con prioridad para las zonas coincidentes con las cuencas lecheras. Los funcionarios confirmaron que están licitando la compra de maquinarias viales para ejecutar esas obras y así reforzar el trabajo que compete a las comunas.
Si bien es un hecho concreto y encaminado, productores rurales palpitan que la intervención provincial no solo no parece suficiente, sino que desconfían de su efectividad, al menos en un territorio tan extenso como el bonaerense. «Desde La Plata y a tanta distancia difícilmente puedan con lo que no hacen los municipios estando bien cerca», insistieron y alertaron por la falta de respuestas de los intendentes.
Fuente: La Nacion