La liquidación de los agroexportadores está más atada al precio internacional de la oleaginosa que al nivel del dólar
El no comprender que en la Patagonia el costo de vida triplica al de la zona centro y norte del país, es la causa del conflicto.
En la industria petrolera un peón gana bruto en Caleta Olivia $2 millones por 8 horas de trabajo; un ayudante, $3 millones y un oficial de producción $4 millones. Ninguno trabaja menos de 12 horas, por lo que se si se le suman las horas extras las sumas suben de forma notable.
Los precios de los productos que no se fabrican en zonas cercanas, acompañan a los sueldos. Un par de zapatillas cuesta más de $200 mil y una mochila con rueditas, $100 mil. Alquilar una muy modesta casa lejos del centro de la ciudad en Comodoro Rivadavia supera los $300 mil y gasta en luz $35 mil. No hay que olvidar que en invierno en la ciudad oscurece poco después de las 4 de la tarde.
Por estas razones, el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, es devastador para ellos. Por eso, los senadores del sur que suman 18 votos, vienen con instrucciones de no aprobar el paquete fiscal.
Esta sombra impidió que los inversores celebren el rebote de la soja que acumula poco más de 7% de suba en el mes. De todas maneras, cerró en USD 445 por tonelada y el campo necesita un precio de equilibrio de USD 500. Para los productores el precio de Chicago es más importante que el tipo de cambio oficial.
La cautela se vio en los escasos negocios en el mercado financiero, donde los dólares cerraron con leves bajas y quedaron ofrecidos para hoy. El dólar MEP cedió $7,49 (-0,8%) a $1.064,47 y el contado con liquidación (CCL) perdió $14,52 (-1,1%) a $1.128,66. La injerencia de la exportación en las cotizaciones fue mínima.
El dólar libre tuvo la demanda de pequeños y medianos ahorristas desilusionados de los plazos fijos y subió $5 a $1.045.
El volumen operado en el Mercado Libre de Cambios (MLC) fue de tan solo USD 195 millones y es el menor desde la devaluación del 13 de diciembre. El Central pudo comprar USD 65 millones.
La escasa demanda de los importadores permitió estas compras oficiales. Con ese volumen de negocios estaba la posibilidad de transformar al Banco Central en vendedor de divisas.
Según el informe de la consultora F2 de Andrés Reschini “la mejora en los arribos de granos a puerto no ha tenido un correlato directo en el volumen del MLC. La estrategia de cobertura de los productores ha sido, por lo general, la retención de los granos. Todavía tienen una alta carga impositiva, sufren la brecha y bajos precios internacionales a pesar de las subas de las últimas ruedas, de modo que difícilmente liquiden más de lo justo y necesario en este escenario”.
El informe agrega que “lo positivo fue que el CCL cedió a pesar de haber tenido un volumen muy bajo en 80/20 y esto fue acompañado con suba en las acciones y deuda soberana”.
Los futuros tuvieron una rueda con una importante contracción de negocios. Se operaron apenas 139.027 contratos y es el menor volumen desde que asumió Javier Milei.
Los Bonos CER confirmaron que están de regreso. Los inversores comenzaron a pagar CER y a vender LECAP porque creen que la inflación no bajará de 5% mensual durante el año y las LECAP rinden poco más de 3%.
La recuperación de precios alcanzó a los bonos más castigados en los últimos días. El TX25, subió 2,40% y el TX26, 4,04%. A su vez, las Letras de Capitalización (LECAP) perdieron 1%.
Los bonos soberanos, favorecidos por la fuerte caída de los bonos del Tesoro norteamericano que ahora rinden 4,57%, quebraron la rutina de tres ruedas consecutivas de estancamiento. El AL30D, el bono más buscado por los inversores, que subió 180% en dólares en un año, sumó una suba de 1,8% y se acerca a la paridad de 60%. Los Globales 2030 tuvieron un alza similar. De esta manera, el riesgo país bajó 16 unidades a 1.229 puntos básicos.
En la Bolsa continuó la euforia impulsada por las subas de Wall Street. Con un buen volumen de negocios de más de $21 mil millones, el Merval de las acciones líderes subió 3% en pesos y 4,2% en dólares. Lo mejor pasó por los bancos. Supervielle aumentó 8,8% y BBVA, 8,7%.
Los ADRS -certificados de tenencias de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron alzas generalizadas. Despegar aumentó 8,0%; Supervielle 8,7% y BBVA, 8,4%.
El mercado seguirá cauteloso y las acciones pueden continuar brillando. Habrá que ver que sucede con la licitación de esta semana de los Bopreal Serie 3 que luce más atractiva porque podrán participar empresas que deben girar utilidades y regalías al exterior. Las dudas del éxito nacen en que al aplicarles el impuesto país más los impuestos habituales, el Estado se queda con 62% del monto a enviar al exterior.
Fuente: Infobae
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