Aparecen como las soluciones para el cambio estructural que se verifica con superficies agrícolas más grandes y mayores distancias a recorrer.
En distintas partes del mundo se está produciendo el avance de los camiones agrícolas como solución en capacidad y costos para trasladar los granos.
Tanto en Sudamérica como en Europa, un camión agrícola puede resolver en un solo viaje el volumen recogido por una cosechadora y su transporte inmediato al acopio o a la industria.
Particularmente en los mercados europeos, las superficies agrícolas son cada vez más grandes y las distancias que hay que recorrer son cada vez más largas.
Multifunción
En el nuevo contexto, la agricultura necesita soluciones a largo plazo para semejante cambio estructural, que resuelvan costos operativos.
Pero también requiere de equipos que sean “todo en uno”, es decir, que puedan transportar granos y otros materiales.
De este modo, con una sola inversión, el productor o el contratista resuelve amplias necesidades logísticas más allá de la agricultura, pudiendo cubrir tareas propias del manejo de forraje u otras demandas de la ganadería.
Poderosos
Las compañías han tomado nota de las transformaciones en marcha y se apresuran a lanzar versiones de camiones de tipo semirremolque, preferentemente con vuelco trasero, tipo batea.
En muchos casos, están fabricados en aluminio, con capacidades que superan los 40.000 litros, emulando a las tolvas autodescargables.
Una particularidad de los nuevos camiones agrícolas es que presentan el chasis sin esquinas ni bordes, a fin de ahorrar peso en beneficio de la carga útil y estabilizar el conjunto.
Así, las fuerzas verticales se agrupan y se transfieren de manera óptima a la última rueda.
Maniobrabilidad
A su vez, la forma redondeada facilita las maniobras, ya que sin superficies angulares el camión tiene más libertad de movimiento.
Otra característica es la caja diseñada de manera cónica (ensanchándose hacia el sector trasero). Esto facilita la descarga de cualquier producto, incluyendo los materiales húmedos, como el estiércol y el forraje.
Fuente: Maquinac.
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