Las “tarjetas agropecuarias”, que hasta la campaña pasada eran uno de los instrumentos favoritos de los productores para financiarse, están entrando en desuso a causa de las elevadas tasas de interés y la desaparición de los convenios especiales con proveedores de insumos.
El estatal Banco Provincia (Bapro), que usualmente solía disponer de tasas de interés preferenciales para el agro, anunció recientemente que el nuevo costo financiero total en pesos para usuarios de la tarjeta agropecuaria ProCampo es del 92,4% anual.
“Los recientes cambios en la tasa de interés aplicables en este tipo de tarjetas motivaron las quejas de muchos productores que ya habían formalizado operaciones” , indica un informe elaborado por la Dirección de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario.
“Las tarjetas rurales deberán esperar para su reactivación a que se verifique una fuerte baja en las tasas de interés. Y eso dependerá de cómo evolucione la política monetaria, cambiaria y fiscal en el próximo año y lo que resta de éste”, añade el documento elabora por Julio Calzada y Juan Ignacio Calivari.
Hasta dos meses atrás las empresas agrícolas podían acceder a créditos bancarios en dólares para capital de trabajo con tasas de interés del 6% al 7%, mientras que en la actualidad los mismos se ubican entre 9% y 10% (aunque sólo para clientes con trayectoria destacada).
“En la zona núcleo de producción se verifican préstamos en dólares con tasas de entre el 10% y 12% con cooperativas, acopios, corredores y proveedores de insumos”, indica el informe de la BCR.
“Los productores que necesitan fondos han optado mayoritariamente por el canje para financiar la actual campaña. Se observa una menor preferencia por el financiamiento bancario en este ciclo y una fuerte presencia del financiamiento vía canje de insumos por granos a cosecha”, añade.
“En algunos casos se ha procedido a cargar al canje tasas de interés en dólares del 1,0% a 1,5% mensual. Otros convierten el valor de los insumos entregados a toneladas de soja a entregar a cosecha, aplicando directamente la cotización de la soja Matba/Rofex 2019”, explica el documento.