Recientemente se compartieron los primeros resultados obtenidos y se anunciaron las nuevas medidas que se suman al esquema de control de la evasión de la industria cárnica, liderado por la Administración Federal de Impuestos Públicos (AFIP) y el cual tiene como objetivo primordial erradicar las irregularidades que flagelan a la cadena pecuaria, tanto en materia impositiva como laboral.
En este conjunto de medidas se enmarca tanto la creación del Registro Fiscal de operadores de la cadena de producción y comercialización de haciendas y carnes bovinas y bubalinas, que permitió duplicar el número de operadores registrados formalmente en la actividad, y el nuevo Régimen de Percepción, Pago a cuenta y Retención del Impuesto al Valor Agregado, que obliga a los frigoríficos a un pago anticipado de alrededor de $55 pesos por animal. Sin el cual, la Subsecretaría de Control Comercial Agropecuario del Ministerio de Agroindustria no autoriza la faena.
Esta última medida, según datos de la AFIP, permitió que a junio de este año el 99% de la hacienda que fue a faena haya realizado el pago a cuenta del IVA.
En este esquema también se anunció la implementación a futuro de un nuevo régimen de pago a cuenta mensual de las obligaciones de Seguridad Social, en función del salario promedio de convenio y estimado a partir de la faena del trimestre precedente.
Esta obligación deberá cancelarse antes del 20 de cada mes, caso contrario el establecimiento no será habilitado para faenar. Por otra parte, se proyecta también poner en marcha un código de trazabilidad y emisión de un remito electrónico para el traslado de medias reses.
Todas estas medidas indudablemente ayudan a combatir las irregularidades que han venido castigando a la industria cárnica en los últimos años, y las cuales incluyen una serie de prácticas ilícitas que van desde el faenamiento de animales en negro; la subfacturación de medias reses, la utilización de matrículas “huecas” para derivar la faena; el no pago de los tributos nacionales y provinciales, y de las cargas provisionales y de los beneficios sociales del personal no declarado y la utilización indebida de la figura de cooperativas de trabajo con el fin de evadir impuestos y costos laborales.
A fin de combatir de manera integral la evasión en la cadena pecuaria, además de realizarse la mayor actividad de fiscalización posible por parte de los organismos pertinentes y de sacar a la luz a todos los operadores irregulares del sector, resulta imperante también trabajar en la modernización del sistema de comercialización de carnes.
El sistema vigente es obsoleto y demanda su actualización. No es recomendable ni razonable continuar distribuyendo medias reses a hombro, como se sigue haciendo actualmente, por cuestiones sanitarias vinculadas a las garantías que debe ofrecerse a los consumidores como así también a los operarios que se ven expuestos a esta modalidad rudimentaria de trabajo.
No obstante, desde el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentina, entidad que nuclea a las empresas frigoríficas del sector con los más altos estándares de calidad y que concentra el 90% de las exportaciones argentinas de carnes vacunas, celebramos todo tipo de medidas que tengan como objetivo primordial transparentar y erradicar las irregularidades que se dan en la cadena de ganados y carnes, ya sea en materia impositiva, previsional, sanitaria, comercial y medioambiental (NAP).
(*) El artículo fue publicado por la Agencia Telam. Mario Ravetino es integrante del Consorcio de Exportadores Argentinas y vicepresidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina)
