La babesiosis, también conocida como piroplasmosis, es una enfermedad parasitaria de los bovinos y otros Animales domésticos y silvestres, ocasionada por protozoarios sanguíneos del genero Babesia spp.
En el ganado bovino, Babesia bovis y B. bigemina, son los principales agentes causales de esta patología y la garrapata es el agente transmisor de esta enfermedad
Síntomas
El periodo de incubación de la enfermedad varía entre 2 y 3 semanas y depende de la edad del animal afectado y de la especie de babesia implicada. Los animales adultos tienden a ser más susceptibles, en tanto que los animales menores de 1 año no suelen presentar signos clínicos.
La patogenicidad y virulencia de la babesia varían considerablemente según la especie; los animales con B. bigemina manifiestan fiebre y anorexia inicialmente, sin embargo, la destrucción masiva de los glóbulos rojos produce anemia y se muestran debilitados al punto que rehúsan a moverse. Al examen clínico se evidencia taquicardia y taquipnea debido a la hemólisis intensa que genera una pobre oxigenación de los tejidos.
Una evaluación hematológica dejará en evidencia la presencia del parásito, disminución del contaje de eritrocitos y hemoglobinemia; esto se acompaña de hemoglobinuria que se manifiesta por una orina de color oscuro que suele alertar al ganadero.
En algunos casos puede haber ictericia o coloración amarillenta de las membranas mucosas y tejidos dada la presencia de altos niveles de bilirrubina en la sangre.
Infección por B. bovis
En los casos de infección por B. bovis, la sintomatología es similar, y aunque la hemoglobinuria y la hemoglobinemia son menos intensas y menos frecuentes, la clínica suele ser más severa, observándose signos nerviosos como ataxia o incoordinación durante la marcha, delirio y postración; los signos neurológicos suelen derivar en la muerte del animal.
Otras especies de Babesias
Las infecciones por Babesia divergens cursan con signos de severidad variables, pudiendo ser de leves a graves, según diversos factores, aunque la vida del animal rara vez está comprometida por esta causa. B. major y B. ovata suelen ser apatógenos o levemente patógenos en la mayoría de los casos.
Diagnóstico
El diagnóstico de babesia se basa en la presencia de los signos característicos, aunque debido a sus semejanzas clínicas con otras patologías febriles y anemizantes, el diagnóstico diferencial debe incluir anaplasmosis, tripanosomosis, hemoglobinuria bacilar, leptospirosis y diversas intoxicaciones; así como también aquellas patologías que cursan con signos neurológicos como la rabia y otras encefalitis del ganado bovino.
La identificación del parásito en frotis sanguíneos es una de las pruebas utilizadas con mayor frecuencia a nivel de campo, sin embargo, existen alternativas de mayor sensibilidad como el PCR o pruebas serológicas