El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) de Argentina fue sede de una jornada en bienestar animal, organizada por la Unión de la Industria Cárnica Argentina (UNICA), que contó con una participación nacional e internacional.
Durante la jornada, los profesores Josef Van Thielen y Bert Driessen de la Universidad de Lovaina, Bélgica presentaron una introducción sobre los principales problemas de bienestar animal en cerdos, patos, equinos y bovinos en Unión Europea.
“En todos los países de Europa, el bienestar animal es muy importante y por ese motivo vinimos hace cuatro años para colaborar con los frigoríficos en la mejorara de esta actividad”, expresó Van Thielen. “Estamos mejorando cada vez más en este sentido, porque los consumidores así lo requieren”.
En ese sentido, Driessen indicó que “la importancia del tema es por su impacto económico en la calidad de la carne, por su relación con la rentabilidad. Todavía tenemos mucho que aprender en el tema. El impacto del bienestar animal está creciendo cada vez más, pero creo que en cinco o diez años llegaremos a un alto estándar”.
El presidente de la UNICA, Jorge Torelli, el director de Control de Gestión y Programas Especiales del Senasa, Marcelo Ballerio, Débora Racciati, del Programa de Bienestar Animal y Florencia Faravelli, de la Dirección Nacional de Inocuidad Agroalimentaria presentaron un resumen de las actividades institucionales que realiza el Organismo en la materia.
Ballerio dijo, con respecto a las experencias que relataron los especialistas belgas, que “siempre tenemos cosas nuevas para conocer de sistemas de producción de crianza distintas a las nuestras y de lo que estamos aplicando en nuestros objetivos también tenemos desarrollos para realizar”.
Por su parte, Torelli afirmó que “el bienestar animal como concepto se viene imponiendo en el mundo y los consumidores ya están exigiendo que las empresas que proveen carne observen prácticas de este tipo”.
“El concepto tiene un sentido humano y económico también debido a que por no tener en cuenta prácticas de bienestar animal muchas veces se deteriora la calidad del producto”, sostuvo.
Este tipo de intercambio permite la creación y el fortalecimiento de redes internacionales en la formulación de medidas sanitarias y de bienestar animal. En este mismo sentido, promueven el comercio transparente y justo de animales y productos relacionados, y en consecuencia, la salud y el bienestar de los animales y de las personas.
