El agro no tiene mucho para festejar en la tribuna de Palermo, luego de atravesar una feroz sequía que golpeó a la economía del país. El presidente Mauricio Macri se adelantó en una corta recorrida el martes por la Rural y, por razones de agenda, no irá mañana al acto oficial, como lo hizo en 2016 y 2017.
El Gobierno tiene una carta para mostrar como la botella medio llena e insuflar optimismo: la reactivación de los embarques de carne, aunque los sectores de la producción moderan el entusiasmo y no son muy proclives a hablar de “boom” exportador. La Bolsa de Comercio de Rosario y el Rosgan proyectan que, hacia 2027, los envíos al exterior se ubicarían en 874 mil toneladas, con una tasa de crecimiento del 11 por ciento anual.
Esta semana, el Presidente celebró el primer envío de carne bovina a Japón, desde la Patagonia, una muy buena señal con vistas al futuro. Macri participa habitualmente de manera personal en la mesa de competitividad de ganados y carnes.
Carta con las retenciones
La Casa Rosada ya ratificó en el ámbito de la Exposición Rural la decisión de mantener el rumbo con la rebaja de las retenciones al complejo soja, en medio de las presiones “de adentro y de afuera” para imponer una pausa en este cronograma.
Para esta decisión, se entiende que, como en otros momentos difíciles, el campo es una de las cartas para que la actividad económica recupere aire en los meses venideros.
En la columna del debe, a poner sobre la mesa por los referentes agropecuarios, están los costos financieros e impositivos, el control de la inflación y el ordenamiento macro, después de que la Argentina decidió recurrir a la ayuda financiera del Fondo Monetario.
Contando el rodeo
Desde la vereda cordobesa, la recuperación del stock bovino (por quinto año consecutivo, hasta ubicarse en su nivel más alto en una década según cifras oficiales), es un peldaño de una escalera a la que le faltan varios escalones.
En la industria no quieren sacar conclusiones apresuradas, por cuanto un mayor número de terneras podría haber pasado al engorde para faena y la producción de novillos pesados quedó relegada en los últimos años.
Se espera que, transcurridas unas semanas, habrá más competencia por estas categorías después de la mejora cambiaria. Por ahora, las inversiones en los frigoríficos están “puertas adentro”, readecuando instalaciones y mejorando salas.
Pero, como prueba de que aún no se puede hablar de un “boom”, el principal frigorífico cordobés faena cuatro días a la semana y tiene un solo turno de despostada, lo que revela capacidad ociosa.
También se da por caída o en stand by la carta de intención entre un grupo brasileño y otro chino por Estancias del Sur, cuya planta está parada desde 2014. En el rubro avícola, Brasil Foods (BRF) lanzó un procedimiento de crisis y tendría a la venta la planta de Avex en Reducción, cerca de Río Cuarto.
La cadena porcina juega su propio partido; hubo en los últimos años inversiones en genética y en granjas, y los productores de menor escala están ante el desafío de integrarse para lograr economía de costos y competir.
Con estos condimentos, a la foto de la provincia exportadora de carnes todavía le faltan pixeles para mostrar una mejor definición.