Cancillería argentina informó este lunes que trabaja junto a frigoríficos para garantizar y agilizar las exportaciones de carne vacuna kosher a Israel en el marco de la pandemia de coronavirus.
Se trata de una venta externa que representaría una facturación de US$ 50 millones para el país, en un mercado que crece y que se espera que cierre el 2020 con 24 mil toneladas exportadas por US$ 170 millones.
En ese marco, se indicó de manera oficial que Felipe Solá gestionó el ingreso al país de 98 rabinos que otorgarán la certificación kosher a la faena de seis plantas frigoríficas: Carnes Pampeanas, Swift Venado Tuerto, Black Bambú, Marfrig, Friar Reconquista, Friar Nelson y Alberdi.
Los religiosos israelíes arribarán a Argentina el próximo miércoles en un vuelo chárter directo desde Israel, que se utilizará también para repatriar argentinos.
“Los primeros tres meses se han exportado a Israel 8,5 mil toneladas de carne por un valor de US$ 60 millones, y queda pendiente un envío de 15,5 mil toneladas que redundará en un ingreso de divisas cercano a los US$ 110 millones”, detalló Solá. “El mercado de Israel es de vital importancia, ya que expone a lo largo de los últimos años una tendencia ascendente y un diferencial de precio del 42% del resto de los mercados”, subrayó.
Por su parte, Mario Ravettino, del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas, destacó el acompañamiento del Gobierno para traer a los rabinos y “permitir un negocio importante”. “Sin la intervención del Gobierno Nacional, este negocio no se podía cerrar y el país se iba a perder un gran negocio en un contexto que Argentina necesita el ingreso de divisas”, dijo.
QUÉ IMPLICA LA CERTIFICACIÓN KOSHER
La certificación kosher demanda procesos productivos especiales que incluyen tanto el cumplimiento de normas higiénicas sanitarias de bienestar animal, así como también del cumplimiento del rito religioso.
El certificado lo otorgan religiosos habilitados por el Rabinato de Israel, y se realiza en cada planta por equipos de 15 personas con responsabilidades muy específicas: el rabino tiene que conocer las leyes teóricas y su aplicación práctica.