Con la mirada distante del Gobierno, se generó una polémica en la industria frigorífica en torno del protocolo sanitario para ampliar las exportaciones de carne vacuna a China, el principal destino de las ventas de este producto del país, con alrededor de la mitad del total.
Pese a que la industria frigorífica respaldó de manera unánime el convenio, en las últimas horas se abrió una grieta en el sector, precisamente por las características del protocolo sanitario con China. Según trascendió, en un primer momento China acercó altas exigencias. Entre otras, que si en un establecimiento hay tuberculosis bovina sea retirado del mercado por un año. La Argentina estaría buscando bajar eso a 60 días. Además, la pretensión china sería que las vacas pasen antes de la faena 90 días en un campo, un concepto que abre interrogantes sobre si, por ejemplo, pueden o no pasar antes de la faena por un mercado concentrador.