Colocó más de 71 mil toneladas peso embarque, apenas por encima de Uruguay. Las restricciones oficiales argentinas, que provocaron una caída interanual del 20%, y la mejora de los competidores, hacen prever una pronta caída del primer puesto. El precio de la carne congelada pegó un salto del 43%.
Con más de 71 mil t peso embarque, la carne argentina resultó el principal origen de las importaciones chinas de la proteína vacuna en los dos primeros meses del año.
Se trata de algo pasajero, dadas las especiales circunstancias del momento.
Por un lado, existen restricciones para las exportaciones argentinas que un año atrás no regían, lo que provocaron una caída interanual de más del 20%.
Por otro, las exportaciones uruguayas, con gran aumento interanual, llegaron a corta distancia del líder momentáneo, sólo dos o tres puntos menos.
Y, finalmente, Brasil, principal proveedor, estuvo vedado de exportar su carne producida entre el 4 de septiembre y el 15 de diciembre por una cuestión sanitaria pero que ya está superada.
En este contexto, EE.UU. logró duplicar sus ventas y N. Zelandia alcanzó un incremento similar al uruguayo.
Sólo Australia las mantuvo interanualmente, debido a las consecuencias de su conflicto diplomático con China, que mantiene a los principales frigoríficos oceánicos deshabilitados para exportar.
Salto de precios
En otro orden de cosas, el precio medio de importación de los cortes congelados sin hueso, principal rubro del comercio, fue de USD7.000, con un aumento del 43% interanual, realmente muy significativo.
Como consecuencia de estos vaivenes, China sólo pudo importar 280 mil t, 26% menos que hace un año.
En definitiva, haber liderado el mercado en este bimestre tan especial no puede llevar a ninguna sensación de meta alcanzada, al haber sido producto de cuestiones azarosas que no perdurarán.
Fuente: www.valorcarne.com.ar