La muerte de vacas y terneros durante el parto debido a la falta de asistencia o la falta de conocimiento a la hora de intervenir es un problema habitual para los productores ganaderos.
Sin embargo, es importante destacar que los animales por sí solos son capaces de llevar a cabo un parto natural y saludable. Solamente se recomienda la intervención del hombre en casos de detectar alguna problemática: esta conclusión se dio en base a varios estudios en todo el mundo.
Por ejemplo, en un estudio llevado a cabo en la Universidad Estatal de Colorado, en Estados Unidos, se monitorearon 7.300 nacimientos en tres explotaciones lecheras comerciales, siendo posteriormente evaluados los rendimientos de vacas y terneros. En dicha investigación se concluyó que cualquier parto que fuera asistido incrementaba las probabilidades de que los becerros murieran antes de los 120 días de edad. Además, las vacas con partos asistidos produjeron menos leche, e incurrieron en un mayor riesgo de causar baja en la misma lactancia.
¿CÓMO Y CUÁNDO AYUDAR A LA VACA EN EL PARTO?
Infocampo investigó sobre esta problemática y se contactó con productores y veterinarios de la región pampeana, que frecuentemente observan partos en los establecimientos.
En primera instancia, acuerdan que cuando se observan los primeros signos de la primera fase del parto, como por ejemplo la vaca muestra inquietud, se levanta y se echa, no come y demás, se debe comenzar a prestar atención y controlar el tiempo que se encuentra en esta actividad.
Pasadas las cuatro horas sin observar cambios, los especialistas recomiendan intervenir.
Antes de realizar cualquier tipo de contacto con el animal, se debe limpiar la vulva y el brazo del operario, preferiblemente aplicar un lubricante y comenzar a evaluar con cuidado la progresión del parto. Si se cuenta con guantes, utilizarlos y lubricarlos. Desinfectar a la vez las posibles herramientas a utilizar.
Si todo parece normal, aseguran que lo mejor es dejar que la vaca siga trabajando sola, sin intervenir.
Cuando se expulsa la “bolsa de agua” es el signo de que el ternero se ha movido hacia el canal del parto y que pronto va a nacer.
Una vez que el ternero está en posición normal, es decir las dos extremidades delanteras y la cabeza primero, se debe dejar que la vaca siga realizando el trabajo.
¿QUÉ HACER SI NO ESTÁ EN LA POSICIÓN CORRECTA?
Muchos acuden en una primera instancia a colocar las cadenas y tirar. Esta practica mal realizadaen un mal momento puede causar daños irreparables, tanto para la vaca como para el ternero.
Es importante previamente tomar un tiempo para favorecer la dilatación. De esta manera la tracción va a ser más fácil y saludable.
• Ternero en posición hacia atrás: no se debe tratar de girar al ternero. Se recomienda poner las cadenas para el parto o una soga y saca al ternero lo más rápido posible. Únicamente realizar este procedimiento si las patas están escondidas, no para los casos óptimos ya que es peligroso.
• Ternero en posición de cabeza hacia atrás o cabeza hacia abajo: se debe empujar al ternero hacia atrás dentro de la cavidad uterina, poner una mano de forma cóncava alrededor de su nariz y con la otra sostenerlo de manera que esté estable. Colocar la cabeza en la posición normal.
• Ternero en posición de pierna delantera hacia atrás: se recomienda empujar al ternero hacia atrás dentro del útero, sujetar la pierna delantera y empujarla hacia adelante lo suficiente como para traer la rodilla hacia adelante. Luego, flexionar la rodilla firmemente y empujarla hacia al frente.
• Ternero en posición de pata flexionada: se debe proceder a empujar al ternero hacia atrás para posicionar nuevamente la pata o el codo. En el caso de la pata, empujar al ternero puede ayudarte a corregir la presentación anormal en sí. En el caso del codo, cuando se haya empujado al ternero hacia atrás dentro del útero, tomar la pierna que esté más atrás y empujarla hacia adelante.
En caso de encontrarse con dificultades para realizar estas “maniobras”, llame de urgencia a un veterinario o si está presente, dejar que actúe lo más rápido posible.
Bajo ningún motivo se debe utilizar más fuerza que la que puedan realizar dos personas traccionando con cadenas o sogas cuando la vaca está pujando. Veterinarios aseguran que han presentado varios casos en los que se amarran las sogas a autos, caballos o cuatriciclos y por esto lesionan a la cría y ocasionan daños irreparables a la madre.
Una vez nacido el ternero, se debe tratar que respire inmediatamente. Limpiar su nariz con los dedos para sacarle todo el fluido amniótico. Debería comenzar a respirar dentro de los 30 o 60 segundos después del parto.