Según un informe realizado por la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA) difundido este martes, el crecimiento del consumo por habitante sumó un 6,8% entre enero y agosto, llegando a los 57.9 kilos.
Esto arroja un incremento del 3,7% durante agosto en relación a los últimos doce meses previos.
El volumen producido de carne vacuna fue de 1.867 millones de toneladas, en el acumulado del año, lo que arrojó una expansión de la cantidad ofrecida de 137.132 toneladas de carne en comparación con enero-agosto del año pasado.
El mercado interno habría absorbido 124,6 mil toneladas de ese incremento, es decir 90,8% del mayor volumen ofrecido. En total se enviaron al mercado interno 1,701 millones de toneladas de carne vacuna, lo que representó también 91,1% del volumen total comercializado.
El nivel de actividad de los frigoríficos vacunos también se vio favorecido ya que en total se faenaron 1,107 millones de cabezas, es decir 6,6% más que un año atrás.
En agosto, la faena de hembras volvió a crecer en mayor proporción que la de machos, 10,8% versus 3,6% anual. No obstante ello, la participación de las hembras en la faena total se mantuvo en 42,8% durante agosto del corriente año.
La producción de carne vacuna en el octavo mes del año, resultó 6% mayor a la registrada en el mismo mes de 2016.
En cuanto a las exportaciones, en julio de 2017, se certificaron un total de 13.447 toneladas peso producto de carne vacuna. Este volumen resultó 14,2% mayor al registrado en julio de 2016. En el acumulado de enero-julio, las exportaciones de carne vacuna acumularon un avance de 24,4% anual.
Por las intensas lluvias que han caído en casi todo el territorio nacional, en el mes de agosto el precio de la hacienda vacuna sufrió algunos aumentos. Por otra parte, el exceso de lluvias genera que la hacienda encerrada en corrales de engorde esté sometida a condiciones inapropiadas que retrasan su terminación. Este consecuente retraso en el engorde de los animales está evitando un aumento de la producción (sobreoferta) y el consecuente impacto (caída) sobre los precios del gordo.
En los mostradores del Gran Buenos Aires, el valor promedio de los cortes de carne vacuna comercializado apenas aumentó 0,3% entre julio y agosto, quedando 14,3% por encima del promedio observado en agosto de 2016 (ritmo que resultó similar al del valor de la hacienda en pie).
En tanto, la carne aviar registró una suba de 2% mensual, si bien en términos interanuales apenas creció 8%.
Por su parte, la carne porcina verificó un aumento de 0,8% con respecto a julio y el mayor aumento interanual entre las carnes consideradas, que llegó a 19,0%.
No obstante ello, entre puntas del año (agosto 17 vs. diciembre 16) la carne vacuna fue la que acumuló la mayor suba (11,2%), guarismo que resultó inferior al del nivel general del Índice de Precios al Consumidor (IPC) elaborado por el INDEC (17,4%, si se considera un alza de 1,3% en agosto) y también bastante menor al avance que exhibió el valor de la hacienda en pie en el mismo período (19,2%).