En la mayoría de los establecimientos de cría del Noa nos encontramos en la mitad del período de servicio. Es sumamente importante prestarles principal atención a los toros.
¿Cuál es la relación toro-vaca en estos momentos? Lo normal a esta altura del servicio es que los vientres debieran estar entre el 60 al 70% preñados, en consecuencia la relación toro-vaca es ahora 2,5 a 3 veces mayor que al inicio del servicio. Por ejemplo, si iniciamos con 5 % de toros, ahora la relación oscila entre 12,6 a 16,6 % de toros.
En base a esto muchas veces nos quedamos tranquilos, pero cuál es la situación real. ¿Cuántos de ellos están actualmente en condiciones de fecundar?, ¿de buscar el vientre en celo, seguir, saltar, concretar la monta, es decir con libido, y finalmente realizar la siembra con un semen fértil?
No es necesario depender de un técnico para realizar esta evaluación, solamente personal capacitado, con criterio de observación, dedicación y voluntad, para tratar de seguir con detenimiento el comportamiento de cada toro, en base a ello transmitir al dueño la situación de cada uno a fin de consultar con un profesional.
¿En qué momentos del día es más conveniente observarlos? Es fundamental observarlos en actividad (capacidad de servicio). En general, por comodidad se realiza cuando los animales bajan a la aguada, pero esto coincide con los momentos de más alta temperatura, cuando naturalmente hay menor actividad. Lo ideal es realizarlo a la mañana temprano y al atardecer. En establecimiento con potreros limpios y chicos, se puede recorrer a caballo y observarlos allí. En potreros grandes y no muy limpios, una práctica recomendable, desde el inicio de la parición y durante el servicio, es rodear tres o cuatro veces por semana cada rodeo a fin de controlar y curar los terneros, y simultáneamente observar los toros. Al realizar esta práctica como rutina los animales se acostumbran y desenvuelven naturalmente, sin una posible inhibición de los toros. Para esto es aconsejable tener la aguada donde concurren a beber, en una ensenada o corral trampa.
Los impedimentos más comunes para un buen servicio a esta altura pueden ser:
Visibles: Lesiones de prepucio u órganos de reproducción, claudicaciones de origen articular, muscular y ósea, Condición Corporal (CC) 3 ó menor, y falta de libido (ganas de trabajar). Toros que se dedican a pelear a los que intentan montar y ellos no; toros que se echan continuamente, o que se mantienen apartados de los vientres. Altas cargas de garrapatas. (ver fotos)
Invisibles: Calidad del semen (que contenga espermatozoides). Endoparásitos.
¿Qué hacer?
En referencia a las lesiones, lo recomendable en cualquier período del servicio es separar los afectados en un potrero solo, cerca de la manga para poder curarlos totalmente. Es habitual ver que se los intenta curar en el mismo lote y continúan con los vientres, por ejemplo lesiones incipientes de prepucio que terminan con prolapsos irrecuperables, se previenen perfectamente al separarlos. No ponerlos nuevamente en servicio hasta la total recuperación.
Es indispensable que los toros estén lo más limpios de garrapatas y endoparásitos durante el servicio, estos más el exceso de trabajos nos llevan al impedimentos invisible (semen de baja o nula capacidad fecundante) y disminución de libido.
Aquellos cuya CC es muy baja, habrá que apartarlos, ponerlos en descanso y ración.
Es recomendable realizar a todos los toros en servicio una desparasitada general, aplicar shock vitamínico (principalmente ADE) y algún buen complejo Yodo-Fosforado.
En caso de ser muchos los toros afectados, reemplazarlos con toros de reserva. Pero no aumentar la cantidad, ya que al haber incrementado la proporción de estos en relación a los vientres que aún falta fecundar, lo normal es que al haber pocas vacas en celo, es más frecuente que se dediquen a pelear entre ellos con posibles lesiones irrecuperables, sin lograr el fin de tener mayor número de vientres preñados.
Condición corporal baja y claudicación en pata derecha
Lesión interdigital de mano izquierda
Lesión inicial de prepucio. Manquera.
Prolapso severo de prepucio
Atrofia muscular por claudicación de pata
Autor/es: Dr. Gonzalo Poodts, Reproducción y Producción Bovina