Una oferta ganadera que supera a una demanda afectada por la gran cantidad de gente que está fuera del Gran Buenos Aires y de las grandes ciudades del interior, y afectada también por las sucesivas olas de calor. El feedlot sigue con una oferta muy importante y la sobreoferta de carne vacuna y sustitutos se encuentra con una demanda estacionalmente débil, que comenzará a recuperarse a partir de la primera quincena de febrero.
Los precios reales del novillito son cuatro por ciento más bajos que hace un año y 23 por ciento más bajos que los de enero del 2016. Si la seca no se revierte, la oferta de ganado, tanto de gordo como invernada, tenderá a crecer, y los mercados tenderán a debilitarse. Todo lo ofertado se venderá, la variable de ajuste será el precio.
Hembras en la faena
Durante el último bimestre del año, la faena siguió creciendo con respecto al año 2016 (+5,7 por ciento), pero a un menor ritmo que los meses anteriores. Llama la atención la participación de las hembras en noviembre (44,6 por ciento) y diciembre (44,9), más altas que el bimestre previo y que los dos últimos meses del año anterior. Aumenta el porcentaje de hembras en la faena, y lo hace sobre una matanza creciendo en términos absolutos.
De acuerdo con la experiencia histórica, una participación de las hembras del 45 por ciento se corresponde con un equilibrio en el stock; no es ni de retención ni de liquidación.
Encierres
En cuanto al feedlot, encerró los últimos dos meses de 2017 un volumen de hacienda casi igual al año anterior (713 mil cabezas), que fue el más alto de la serie de 2009 a la fecha, lo que marca que el nivel de oferta de los corrales no debería aflojar en el corto plazo.
El feedlot (datos del Senasa) engordó en 2017 unos 4,50 millones de cabezas, un 16 por ciento más que el año anterior.
En cuanto a las exportaciones, que en el último bimestre del año cayeron un 12 por ciento con respecto a los dos meses anteriores, cierran el año con 308 mil toneladas (res con hueso), un 34 por ciento más que el año anterior.
Evolución del stock
Durante el año ganadero 1º de abril 2016-30 de marzo 2017, las principales zonas productivas del país sufrieron una sucesión de graves inundaciones, incendios de campos, secas y olas de calor que determinaron que a marzo del 2017 el stock registrara un crecimiento menor al esperado, de sólo 700 mil cabezas (+1,4 por ciento).
Durante el año ganadero en curso, iniciado el 1º de abril de 2017, se han registrado los mismos fenómenos adversos, especialmente las inundaciones invernales, las olas de calor, y la seca sobre el final del período, lo que, agregado a una extracción de 700 mil cabezas mayor, determinaría que el stock resultante a marzo próximo sería similar o sólo algo mayor al de marzo pasado.
¿Y el destete?
Se sabe que la faena y la mortandad han sido elevadas, pero no se sabe cuál será la cantidad de terneros a destetarse en el próximo otoño; esta es la variable más importante que nos falta conocer para pronosticar el dato de stock. En principio, el destete sería muy parecido a los dos años anteriores (14,1 millones de crías). Los terneros que se destetarán en pocos meses más serán resultado del servicio 2016, que se produjo después de graves inundaciones, y que en su parte final (diciembre-enero) sufrió los efectos de las graves olas de calor sobre los celos y la preñez.