El precio de la carne vacuna al consumidor experimentó subas del 30 por ciento en los últimos 24 meses, mientras que el kilo vivo de hacienda para faena, en 2017, en la categoría de consumo liviano se incrementó en 22 por ciento, de acuerdo a un informe de la Federación de la Industria Frigorífica de la República Argentina
En su sitio oficial, Fifra consignó que el precio del pollo fresco -luego de la baja registrada en el último mes- recuperó los valores del mes de octubre.
“La carne aviar sigue muy retrasada en precio con respecto a la carne vacuna, esto se observa claramente al comparar los últimos 12 y 24 meses, en los cuales el incremento fue de apenas 6% y 11% respectivamente”, alertó Fifra. La relación carne vacuna/carne aviar finalizó el año 2017 en 3.63, valor superior al del comienzo de año que fue de 3.50; y también mayor a los años anteriores.
Entre los aspectos más destacados del año que acaba de finalizar se encuentra la recuperación en el volumen de faena y de las exportaciones, con China como principal mercado, en un marco de estabilidad en el stock con un incremento en la participación de hembras en la faena en el último bimestre.
Por otra parte, los precios del ganado perdieron frente a la inflación y a su vez subieron menos que el precio de la carne al consumidor.
Se mantuvo la buena relación carne/maíz, con alta ocupación en los corrales de engorde (64%), manteniendo alta la oferta de ganado con destino a faena. Para el año que comienza no se esperan cambios bruscos en los parámetros de análisis, por lo cual habrá que prestar especial atención al componente de los costos, a fin de lograr rentabilidad a lo largo de la cadena.