Tras la tremenda sequía de la última campaña, todo indica que el campo tendrá revancha: según las estimaciones presentadas este miércoles por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la cosecha 2018/19 será de 125 millones de toneladas de granos, un volumen récord que con los números actuales tiene un valor bruto de más de 76.400 millones de dólares; 9.300 millones de dólares más que la cosecha anterior.
La exportación de cereales y oleaginosas rondaría los 26.000 millones de dólares y la recaudación fiscal sería de 10.100 millones de dólares, lo que representa un aumento de 2.900 millones de dólares respecto a la campaña 2017/18.
Así se dejarían atrás las pérdidas de la última campaña, que el presidente de la Bolsa, Raúl Cavallo, estimó ayer en US$ 6.000 millones. Otras fuentes llevaban esa cifra hasta los US$ 8.000 millones. A pesar de ser cálculos previos sujetos a diversas variables, los números alcanzan para inyectar buenas perspectivas, al sector agropecuario y a la economía de todo el país.
Aun con las nuevas retenciones, los márgenes en la precampaña 18/19 en dólares por hectárea son mejores que los de 2017/18 en casi todas las regiones y cultivos, según explicó Agustín Tejeda Rodríguez, economista jefe de la Bolsa de Cereales porteña. Además, el anuncio del actual esquema que grava las exportaciones llegó cuando la mayoría de los productores ya había tomado las decisiones de siembra.
Ese panorama, sumado a un pronóstico climático favorable, hará que los productores agropecuarios no frenen las inversiones en marcha: por unos 10.700 millones de dólares en insumos y servicios, para aspirar a una campaña récord en área sembrada (33,5 millones de hectáreas) y producción.
«El producto bruto agrícola, que suma el valor agregado por las cadenas de cereales y oleaginosas (insumos, servicios, industria de primera transformación y exportación), alcanzaría de esta manera los 30.417 millones de dólares», explicó Tejeda Rodríguez. Respecto de la campaña 2016/17, que no tuvo efectos climáticos tan adversos, la mejora es del 5,5 %. De esa torta el Gobierno se queda con el 33 por ciento en materia de impuestos y retenciones. Para los productores quedará el 26 por ciento.
Según los cálculos de la entidad, los cultivos agrícolas representan el 6,6 por ciento del producto bruto interno argentino y el 38 por ciento de las exportaciones de bienes. En la campaña 2018/19 se espera que las exportaciones de trigo alcancen el récord de 12,8 millones de toneladas y las de maíz ronden los 30,5 millones de toneladas, también récord. El panorama para el complejo industrial sojero no está tan claro. Según explicaron los técnicos de la Bolsa, la eliminación del diferencial de retenciones a los granos respecto de las harinas y aceites y la imprevisible guerra comercial entre China y Estados Unidos harían variar la composición de los embarques: la molienda caería a 37 millones de toneladas y la exportación de poroto crecería hasta los 15 millones de toneladas.
Fuente: Clarín