Las autoridades de la Administración Federal de Ingresos Públicos dispusieron que a partir del próximo 1 de septiembre la comercialización de carne sólo podrá hacerse luego de obtener un “Remito Electrónico Cárnico” (REC) en sitio de la Afip.
Los frigoríficos, usuarios de faena, abastecedores, despostaderos y consignatarios tanto de carne como directos deberán gestionar el REC antes de trasladar la mercadería hacia el destino final (como restaurantes, supermercados o carnicerías). La medida –publicada hoy en el Boletín Oficial– no comprende a los productos cárnicos importados o exportados.
El REC tendrá una vigencia de 72 horas. Los compradores de la mercadería, una vez recibida la misma, deberán ingresar al sitio de la Afip para validar la recepción del documento electrónico.
El nuevo régimen permitirá, en combinación con los datos aportados por los controladores electrónicos de faena, instrumentar un sistema de trazabilidad completo de todo el circuito comercial de la carne bovina.
El pasado 1 de mayo comenzó a ser obligatorio en todo el territorio nacional la implementación en frigoríficos bovinos de controladores electrónicos de faena, los cuales permiten hacer un seguimiento automatizado en tiempo real de los rendimientos en gancho de cada uno de los animales sacrificados. Los dispositivos están protegidos por precintos orientados a evitar o delatar cualquier intento de desconexión o manipulación no autorizada.
Posteriormente, cuando se instrumente el REC, será posible rastrear, prácticamente también en tiempo real, la comercialización de la carne una vez salida del frigorífico o matadero, de manera tal que a las carnicerías que eluden o evaden impuestos les resultará mucho más difícil esa llevar adelante esa práctica.