Biogénesis Bagó anunció que invertirá USD 10 millones en su planta de producción de vacunas antiaftosa de Garín, con el objetivo de actualizar su sistema de calidad y adecuar los niveles de bioseguridad a la nueva normativa del Senasa y los requerimientos de países donde proyecta su mayor crecimiento.
La iniciativa está acompañada por programas de expansión territorial de licencias de investigación y desarrollo, enfocado principalmente en el sudeste asiático, donde ya exporta a tres destinos.
Rodolfo-Bellinzoni.
“Decidimos invertir en Argentina para producir desde aquí una vacuna de alta calidad a nivel global, atendiendo las demandas específicas de cada mercado que vamos a incorporar. Todo este proceso de actualización de la planta va a permitir consolidar la capacidad, la seguridad y la calidad de respuesta a nivel local y será la base del crecimiento de la empresa en su estrategia de expansión global”, remarcó Rodolfo Bellinzoni, director de Operaciones Industriales e Innovación de la firma.
La inversión, realizada con capitales propios, prevé el desarrollo de un plan de ingeniería y obras de infraestructura durante los próximos dos años, con el objetivo de poner a la planta en el máximo nivel de tecnología y bioseguridad para la elaboración de vacunas con el manejo de distintas cepas del virus de la aftosa, que aseguren la respuesta inmunitaria de los rodeos en cada región productiva.
Asimismo, le permitirá a la compañía cumplir con los nuevos requerimientos del banco de antígenos norteamericano, al cual provee desde 2006. “Para intensificar la estrategia preventiva ante un posible brote de aftosa que afecte a esa región, nos pidieron la expansión del banco por lo que necesitamos agilizar nuestra capacidad de respuesta, además de actualizar nuestros sistemas de bioseguridad, considerando las nuevas exigencias a nivel local”, explicó Bellinzoni.
La planta de Garín puede producir 300 millones de dosis de vacunas antiaftosa por año. Desde allí se abastece a los mercados latinoamericanos. Además, se realizan exportaciones a Taiwán, Corea del Sur y Vietnam, donde ya se comercializaron 170 millones de dosis.
Más mercados
Según el anuncio realizado en La Rural, en la búsqueda de sumar más destinos ya están avanzadas las gestiones en países como Mongolia, Camboya, Laos y Tailandia. En las proyecciones para los próximos cinco años, espera realizar operaciones por USD 100 millones en el Sudeste Asiático, pero también tiene intención de abrir mercados en África y Medio Oriente.
Para sostener este posicionamiento, Bellinzoni explicó que además de la actualización de la planta, se han creado áreas de investigación y desarrollo y de gestión de proyectos a nivel local y global, enfocados exclusivamente en fiebre aftosa.
Por otra parte, destacó el rol de Senasa en la estrategia exportadora de la compañía, ya que en organismo funciona el laboratorio de referencia internacional de la Organización Mundial de la Salud Animal (OIE) para la fiebre aftosa y allí se realizan todas las pruebas para validar los procesos de desarrollo, obtención de licencias y medición de eficacia de las vacunas, que resultan fundamentales para abordar mercados exigentes como los asiáticos.
En China
Esteban Turic.
Por otra parte, la firma seguirá invirtiendo en el gigante asiático. En ese sentido, a sus activos actuales sumará la creación de un centro de investigación y desarrollo sobre enfermedades bovinas que afectan a los rodeos chinos, para lo cual tiene previsto establecer alianzas de trabajo con instituciones científico técnicas del lugar para generar conocimiento y desarrollar soluciones sanitarias específicas.
De esta manera, busca diversificar el portfolio de productos en China, más allá de la elaboración de vacuna antiaftosa en la planta Yangling Yinhai Biotechnology.
Cabe recordar que esta planta tiene una capacidad de producción de 400 millones de dosis al año y se construyó exclusivamente para abastecer al mercado chino, que demanda anualmente 2 mil millones de dosis, sobre un total mundial de 3 mil millones de dosis.
Para finalizar, Esteban Turic, Director General de Biogénesis Bagó, dijo a Valor Carne que “a pesar de estas inversiones vienen de la mano de una demanda internacional, repercuten también a nivel local porque nos permiten tener una empresa mucho más tecnificada y generar mayor cantidad de conocimiento”. Y agregó que la Argentina “no está excluida de la dinámica global de las enfermedades, con lo cual todo el conocimiento que vayamos desarrollando en productos a nivel industrial es también una seguridad más para el país”.